Las imágenes son impactantes tanto como la diferencia de velocidad entre la que estaba permitido en esa zona y la que estaba circulando el Alvia en la curva A Grandeira, en Santiago de Compostela. De acuerdo a las primeras reconstrucciones, en el momento previo al impacto, una señal advirtió al maquinista que debía reducir la velocidad a 80 kilómetros por hora. El tren circulaba a 190.

José Francisco Garzón Amo, conductor de 52 años, "está detenido por imprudencia", afirmó el jefe superior de la policía de Galicia, el comisario Jaime Iglesias en una rueda de prensa. Aún no ha prestado declaraciones porque se encuentra en el hospital local con heridas leves.

Garzón Amo tenía 30 años de profesional en la compañía ferroviaria RENFE y desde hace más de diez años era conductor. Las palabras que se reproducen de las grabaciones son escalofriantes. "Tenía que ir a 80 y voy a 190", le dijo el maquinista al servicio de emergencia. "La he jodido. Me quiero morir", siguió.

Por si esto fuera poco, se difundieron capturas de pantalla de la supuesta página de Facebook del implicado, hechas antes de que fuera desactivada de la web en la mañana del jueves. En una de esas imágenes, de marzo de 2012, aparece una foto de Garzón, con el cuentakilómetros que marca 200 kilómetros por hora y se jacta de manejar a semejante velocidad.

Si bien RENFE considera que aún es prematuro hacer conjeturas sobre la causa de la peor tragedia ferroviaria de España desde 1944, el secretario de Estado de Transportes, Rafael Catalá, anticipó que todo apunta al exceso de velocidad.

La caja negra del tren, mientras tanto, está "bajo custodia" policial y se entregará a la justicia para continuar la investigación del hecho.

De acuerdo a lo que confirmó la policía científica española en las últimas horas la cantidad de muertos por el descarrilamiento es de 78, pese a que se había difundido que eran 80.