Los tres últimos detenidos por el ataque que sufrió hace dos semanas una adolescente de 14 años en la localidad bonaerense de Saladillo, fueron liberados por el juez de la causa, quien consideró que no había suficientes pruebas para incriminarlos, informaron fuentes judiciales. Se trata de Osmar "Koki" Mansilla (30), su hermano Javier Mansilla (23) y José Ricardo Figueroa (27), quienes fueron aprehendidos el jueves último por el fiscal de Cañuelas Rodolfo Robatto, en una serie de allanamientos realizados a partir del aporte de un testigo de identidad reservada.

El viernes, el fiscal Robatto, luego de indagarlos, le pidió al juez de Garantías 6 de La Plata, Fernando Jorge Mateos, que convierta sus aprehensiones en detenciones, pero el magistrado no convalidó el pedido y los liberó por falta de pruebas. "Esto no los exculpa ni desliga del hecho. Siguen bajo investigación e imputados y seguiremos trabajando para colectar más pruebas para volver a detenerlos", dijo a Télam una fuente judicial.

El abogado Julio César Torrada, quien representa en el expediente a la familia de la víctima, opinó que "las detenciones quizás fueron demasiado apresuradas, pero habrá que seguir trabajando para definir si estos tres muchachos tuvieron alguna vinculación con el hecho".

Con estas tres liberaciones, en la causa ahora sólo quedaron dos detenidos: Eduardo "Pato" Morales (23), detenido horas después del hecho, y el carnicero Juan Cruz Lojo (26), apresado la semana pasada en la localidad bonaerense de Las Flores. En el caso de Lojo, la Policía Científica analiza en laboratorio una serie de elementos secuestrados en su casa y hay testigos que afirmaron que se fue de Saladillo al día siguiente del ataque y que lo vieron rasguñado. Tanto los dos que quedaron presos como los tres liberados se declararon inocentes al declarar ante la Justicia.

El fiscal Robatto también analizaba la participación en el hecho de una adolescente de 15 años, amiga de la víctima y novia de uno de los que permanecen detenidos, ante la sospecha de que pudo haber colaborado en el ataque en forma activa, como espectadora o con el rol de "entregadora", aunque por su edad es inimputable.

La pista que desde el inicio manejan los investigadores es que la chica de 14 años golpeada y abusada sexualmente, fue víctima el sábado 24 de noviembre de una venganza tramada por un grupo de amigos de un joven con el que ella salía y que se había suicidado un día antes.

Según esa hipótesis, Marcos Gorosito (22) se ahorcó el viernes 23 de noviembre en su propia casa cuando su pareja y madre de su pequeña hija lo abandonó al enterarse que había mantenido una relación paralela con la adolescente. Por tal motivo, esa línea investigativa apunta a que al otro día por la noche, sus amigos hicieron una reunión a la que invitaron a la chica y allí mismo concretaron la venganza, de la que participaron varias personas.

La adolescente fue encontrada cerca de las 4 de la madrugada del domingo en la zona del Parque República de Italia, de Saladillo, con golpes en todo su cuerpo y su rostro desfigurado, desnuda de la cintura para abajo y con signos de haber sido violada. La chica aún se encuentra internada en el hospital Sor María Ludovica de La Plata, donde el sábado último informaron que la víctima mejoró su estado de salud pero todavía no hablaba y que iba a ser trasladada a una sala de terapia intermedia.