Cuando más se acerca la fecha pactada para la firma de un nuevo convenio, más parecen alejarse las posiciones del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) y la Agremiación Médica Platense (AMP).

El conflicto, que lleva ya más de dos meses, sumó ayer nuevas esquirlas. Fue luego de que la agremiación profesional denunciara una deuda acumulada superior a los 20 millones de pesos por parte de la obra social, al tiempo que puso el grito en el cielo ante la falta de convocatoria tanto para discutir la actualización de honorarios como un nuevo acuerdo, cuyo proyecto los médicos ya presentaron. En el IOMA, en tanto, consideran que la facturación reclamada “carece de respaldo” y que el convenio propuesto por la AMP es “insostenible”, mientras analizan una oferta superior al 10 por ciento de incremento sobre las prácticas médicas, “insuficiente” a ojos de la Agremiación, que pide una actualización cercana al 25 por ciento.

Empieza a resquebrajarse la tregua que, con mediación del Defensor del Pueblo, médicos y funcionarios firmaron el 16 de julio. Esa fecha -al cabo de un derrotero que incluyó decenas de causas penales contra médicos por presuntos fraudes millonarios (esta semana se sumarían cinco denuncias más), la decisión del IOMA de “prescindir de su vínculo con la AMP y el corte en la cobertura de casi 300.000 afiliados platenses durante casi diez días- las partes se comprometieron a discutir un nuevo acuerdo en un plazo de 60 días que vence el mes próximo.

La Agremiación, como se dijo, ya elevó a la obra social estatal una copia del proyecto que, entre sus 25 cláusulas, incluye “un Sistema Compartido de Auditoría para controlar en forma conjunta todas las prestaciones realizadas al IOMA por los médicos agremiados; un nuevo listado de prestaciones; incorpora la totalidad de prácticas y consultas; a la vez que jerarquiza al primer nivel de atención”, destacó el secretario de la AMP, Gastón Quintans, que también insistió en la necesidad de “reabrir el diálogo”.

Según pudo saber EL DIA, el IOMA volverá a convocar a los profesionales platenses de la salud la próxima semana.

No será una reunión fácil. Por varios motivos. El primero, refiere al citado convenio elaborado por la Agremiación y, especialmente, a dos cláusulas que el IOMA no quiere dejar pasar: la 5º, que en uno de sus párrafos le exige a la obra social “abstenerse de celebrar convenios en forma directa con los profesionales adheridos a la AMP” y que en el Instituto leen como “la convalidación de un monopolio”. Y la 15º, que es la que establece un sistema de auditoría compartida, un mecanismo de trabajo que, como juzgan en el organismo provincial, resulta “inexistente”.

El segundo punto de la discordia tiene que ver, según la denuncia de la AMP, con una deuda acumulada del IOMA que superaría los 20 millones de pesos (en concepto de honorarios de casi 800 médicos de la Ciudad), de los cuales 16 millones corresponderían al período que va de marzo al mes en curso, los meses de la pandemia. ¿Qué ocurrió? En palabras de Quintans, cuando el coronavirus irrumpió en la Región los médicos empezaron a resolver parte de las consultas por videollamadas o a evitar el uso de recetas y planillas físicas, sin requerir la firma del afiliado, “para reducir el contacto y prevenir contagios”.

En el IOMA entienden que “falta documentación respaldatoria que acredite las prestaciones”, mientras aclaran que, “si corresponde”, saldarán los débitos de la gestión anterior.