Axel Kicillof acordó con los gobernadores de Río Negro, Neuquén, La Pampa y Mendoza la construcción del dique regulador Paso Alsina sobre el río Colorado, una obra que ayudará a los distritos del extremo sur de la provincia a palear la escases de agua.

El dique demandará una inversión de unos 48 millones de dólares y se construirá en su totalidad sobre territorio bonaerense. Permitirá aprovechar el agua que baja desde la cordillera para ampliar la zona de riego en Villarino y Patagones, distritos que sufren la falta de lluvias durante buena parte del año.

El objetivo de la presa es regular el caudal de la cuenca baja del río Colorado para ajustarlo a la demanda del sistema de riego del sur bonaerense. La obra permitirá mejorar el uso del recurso, embalsando el agua cuando se producen precipitaciones.

"Para la provincia de Buenos Aires es la primera obra de envergadura que se embarca en la lucha contra el cambio climático", dijo a LPO el subsecretario de Recursos Hídricos, Guillermo Jelinski. "Es una obra muy importante que consolida un cambio de paradigma que venimos implementando. Había sido proyectada en los 70 y nunca se hizo. Kicillof la pidió apenas llegó al gobierno", agregó.

Viaje al dragado del Río Salado, la obra de movimiento de suelo más importante del país

La zona cuenta con el embalse Casa de Piedra -ubicado río arriba, en el límite entre Río Negro y La Pampa- sin embargo, requiere nuevas obras para aumentar la producción en el corto plazo. Es que la producción agropecuaria en Villarino y Patagones depende del sistema de riego para su desarrollo.

Desde La Plata explican que tras la aprobación de la obra por parte del Consejo de Comité de Cuenca del Río Colorado (COIRCO) seguirá la gestión de los informes de impacto ambiental y estudios económicos. Sin embargo, con luz verde por parte de las provincias que conforman la cuenca, se puede comenzar la negociación con organismos internacionales por el millonario financiamiento.

El área de influencia de la Presa comprende los municipios de Mayor Buratovich, Pedro Luro y Villalonga. Esta zona se caracteriza principalmente por el desarrollo de cultivos de cereales, pasturas perennes y hortalizas totalizando aproximadamente unas 200.000 hectáreas sembradas, de las cuales la mitad son irrigadas. Además, también existe una importante producción ganadera que alcanza aproximadamente las 300.000 cabezas.

En julio de 2020, Kicillof planteó a los gobernadores de Río Negro, Neuquén, La Pampa y Mendoza sus pretensiones de avanzar con el dique.

Fue en una reunión del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado donde planteó que, a través del ministerio de Infraestructura, comenzaría a evaluar los términos de referencia para la contratación de los estudios de base y de la viabilidad económica y ambiental del proyecto.

"El dique permitirá hacer más eficiente la gestión del uso de agua en los períodos de escasez hídrica en las áreas de riego de la provincia de Buenos Aires", dijo Kicillof y agregó que el volumen de reserva que generará la obra una vez terminada será de utilidad para toda la cuenca.

En ese encuentro los demás gobernadores respaldaron a Kicillof y le aseguraron que, una vez presentada la documentación y cumpliendo con todos los procedimientos previstos, se analizaría la propuesta para alcanzar la aprobación por parte del Consejo de Gobierno. Eso fue lo que sucedió este martes.

Para entender la importancia de la obra, desde La Plata hacen hincapié en el corte del sistema de riego que se activa al comenzar cada una de las lluvias en el valle bonaerense del río Colorado.

En términos llanos esto significa que cada vez que se registren lluvias de de 40 milímetros o más en el sur de Buenos Aires el dique cortará el escurrimiento del río Colorado, dejando que la zona productiva aproveche el agua llovida. De este modo, el caudal del río quedará almacenado en parte en Paso Alsina y en parte en Casa de Piedra.

Actualmente, la demora de respuesta de cada modificación de caudal entre Casa de Piedra y el valle bonaerense del Colorado es de aproximadamente de ocho días, tiempo que el agua continúa escurriendo si no es retenida en Paso Alsina.