Diario Rio Uruguay fue el único medio que presenció la audiencia N°47 del juicio a los policías acusados por los delitos de sedición, se  trata de la causa caratulada como “Zaragoza, Carlos Daniel y otros s/ sedición, privación ilegítima de la libertad, daño calificado, robo agravado por la calidad de funcionario público e instigación pública”.

En esta oportunidad quienes dieron sus testimonios fueron el ex jefe de operaciones, Hugo Ambrosio Tomás Vega, quien dijo acerca del 8 y 9 diciembre que se enteró por la comunidad, los medios y los comentarios que se iban haciendo y eso hizo lo preocupó porque ya lo ha vivido y dejó secuelas en Concordia y este quizás éste se pudo haber omitido.

“El día 8 me trabajaba la cabeza queriendo participar pero de intermediario, porque me preocupaban los saqueos, se habían perdido vidas y estaba todo descontrolado. El día 9 lo llamé a Lucio Villalba (Jefe Departamental durante el conflicto) para decirle que quería colaborar y hablar con los cabecillas o los más veteranos, y así poder intervenir”, acotó. Para ampliar luego diciendo que “Lucio me dijo te agradezco pero se nos fue todo de las manos. Que había que esperar porque todo quedaba en las manos del gobernador”, sintetizó el ex jefe de operaciones que estuvo 32 años trabajando en la fuerza.

Tras este testimonio se dio lugar a Julio Cesar Nuñez, de 20 años en el servicio, éste subrayó que el día 8 de diciembre alrededor de las 21.50 estaba en su domicilio, recibió un llamado de su cuñada, que había una manifestación en la departamental, él tenía conocimiento de esto porque ya había participado de las anteriores. Concurrió a la plaza pero se quedó en la vereda de enfrente y vio las circunstancias que estaban pasando. Desde adentro se escuchaba el redoblante y siempre se mantenía lejos por cuestiones personales y porque si de la policía lo observaban luego le podrían iniciar un sumario.

Más tarde ingresa a la jefatura, más precisamente al baño y ve mucha gente dentro y algunos tocando el redoblante. Se acercó a un oficial que le comentó sobre la agresión al jefe de logística, tras esto decide irse a su casa y regresar al día siguiente porque debía cumplir con su trabajo.

“El día 9 (de diciembre) llego aproximadamente a las  8.50 me hago cargo de la oficina de guardia, y me quedé ahí hasta las 21.30 horas”. También informó que “al llegar  me di cuenta que el teléfono no tenía entrada de llamadas, pero sí funcionaba para las llamadas internas”.

Dio cuenta de otros datos importantes como que el teléfono siempre tuvo problemas. Cuando no se registran llamadas de afuera, las internas siempre funcionan. Además objetó que faltaba el DVR, que estaba el vidrio y  apuntó que “nadie me impidió que no trabaje ese día” e hizo mención a que “ese día me llamó  el jefe de Feliciano para saber si desde la ciudad irían a saquear los comercios de allá”.

 

Testimonio de Maximiliano Paredes

 

El imputado no quiso declarar con la presencia de los demás implicados en la causa y puntualizó que “no reconozco ninguno de los hechos que se me imputan en la causa”.

Luego empezó a narrar sobre los días de diciembre, diciendo que el domingo 8 se encontraba en su domicilio y se estaba preparando para ir a cenar en la casa de un amigo. Sale de su domicilio y recibe el llamado del lugar donde iría avisándole que estaban demorados, por lo que en ese momento se encontraba sobre calle La Rioja y recordó que en esa jornada se haría la entrega de un petitorio, sabía de esto porque había concurrió a la entrega de los dos anteriores.

Al llegar a la esquina de la jefatura le llamó la atención la cantidad de gente que había, ya que según lo que pudo apreciar eran alrededor de 300 personas. Se encuentra con una conocida que le entrega una filmadora, por lo que él empieza a filmar todo lo que estaba sucediendo.

Luego cuando se ubican enfrente del colegio de abogados se le da por filmar el comando radio eléctrico, y eso le llama la atención porque había policías pero las luces estaban todas apagadas.

A la mañana siguiente, explica que estaba escuchando un programa radial, donde se estaba entrevistando al gobernador y al ministro Adán Balh, escuchó decir de este último que ellos los manifestantes eran todos malandras, borrachos y sediciosos, eso le molestó  mucho y  fue en ese momento cuando conoce por primera vez la palabra sedición.

Paredes, puntualizó en su declaración que  lo que él hizo fue un reclamo salarial por medio de la entrega del petitorio. Informó además que “yo vivía haciendo adicionales por eso me pareció un reclamo salarial justo, y porque por hacer esto no sabía que me iban a llevar preso”.

Además “creo que fui elegido porque fui uno de los que me moví por el tema de las paritarias que el gobernador nos dijo que tendríamos”.

Por último, aseguró que “con el tiempo me di fui dando cuenta que fuimos elegidos para estar acá”, porque “no entiendo la elección de la fiscalía porque en la manifestación se ve que somos más de 100 y acá hay sólo 18”.

La audiencia continuará el próximo miércoles con una doble jornada, que serán a las 8.30 y 17.30 horas.