La secretaria general del gremio, Basilisia Benítez, explicó que la propuesta no tiene motivaciones políticas sino transparentar la situación, buscar alternativas y lograr la normalización de la obra social, con participación mayoritaria de las y los trabajadores en su directorio o autoridades de conducción.

También indicó que este martes AJUFSA mantendrá una reunión con el presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Marcos Bruno Quinteros, para exponer la preocupación del gremio. “Con la salud y la vida no se negocia".

Por eso solicitamos públicamente la recuperación de nuestra obra social y hacemos extensivo nuestro descontento e invitamos a las demás asociaciones sindicales, representantes del personal público formoseño a trabajar en forma conjunta para lograr la recuperación del IASEP y la mejora en todos sus ámbitos, que por derecho nos corresponde”, expresó.

Benítez remarcó que existe una profunda preocupación por las deficiencias en el cumplimiento de las prestaciones de la obra social de los empleados públicos, que se agrava aún más con la suspensión de varias clínicas privadas.

“Las penurias que a diario padecemos los afiliados y afiliadas al IASEP son de larga data, es de conocimiento del actual interventor, doctor Claudio Samaniego, y ha tomado estado público”, señaló.

En ese marco, se refirió a los principales problemas: “acceder a una prestación con orden médica de IASEP demora entre los 7 y 30 días, pero si se abona la psicología, psicopedagogía, psiquiatría, nutrición o traumatología son extremadamente limitadas, de prácticamente nulas para los afiliados. Hemos padecido mucho tiempo una atención deficiente, con filas interminables, que no distinguen de jóvenes y adultos para efectuar las autorizaciones o adquirir medicamentos. Además continúa la faltante de medicamentos. Capítulo aparte es lo que pasa en las ciudades y localidades del interior provincial, donde los problemas son más graves”.

Benítez insistió en que el gremio quiere una obra social eficiente, que responda a las necesidades y requerimientos de los afiliados, que hacen sus aportes todos los meses. “Como si todo esto fuera poco, ahora la situación se agrava con el cese de la cobertura de varias clínicas y sanatorios privados, reduciendo las opciones de atención. Se pretende la atención en nosocomios públicos, que sin desmerecer sus equipamientos, en el Hospital de Alta Complejidad dan turnos para febrero del año próximo.

Es injusto asistir obligatoriamente a un hospital público cuando todos los meses tributamos el importe establecido por la obra social; por lo que mínimamente deberíamos tener diferentes opciones que nos garanticen atenciones más inmediatas”, agregó.

Sostuvo que los propios afiliados plantean desde hace tiempo su malestar por el funcionamiento del IASEP y que lejos de brindar soluciones, decae a diario en su calidad y sobre todo en el cumplimiento de sus obligaciones para con la salud del personal público formoseño. “Los hechos hablan por sí solos y nos demuestran que la larga intervención no sólo impidió un control de gestión por parte de los trabajadores para transparentar el uso de los recursos aportados, sino que debemos concluir que la gestión también fracasó, ya que llevó a un deterioro de las prestaciones de la obra social, que no permite siquiera garantizar la salud de sus afiliados.

Sin ánimo de polemizar, se refirió a la imposibilidad de todo empleado de la administración pública provincial a renunciar al IASEP y agregó que tiene conocimiento que jueces y funcionarios judiciales de la provincia tienen otra obra social. “Sin embargo, los trabajadores no tenemos esa opción.

Muchos compañeros plantean esta cuestión y la verdad que es un tema para charlarlo, asesorarnos y escuchar a los especialistas. Da para un largo debate porque hay afiliados que quieren pasarse a otra prestadora de salud. Mientras se ve eso, necesitamos que el IASEP mejore en forma urgente la atención de la salud tanto en capital como en todo el interior provincial”, concluyó.