El Instituto de Seguridad Social de Neuquén (ISSN) aclaró que pagó en tiempo y forma parte de la deuda que mantiene con el Colegio Médico. En consecuencia, repudió la actitud del sector que para hoy tiene previsto, como forma de protesta, trabajar con los afiliados vía reintegro. La misma modalidad se aplicará el próximo jueves.

Desde la obra social consideraron que las medidas ejecutadas por el Colegio Médico de Neuquén “sólo tienen fines políticos, ajenos al normal desenvolvimiento de la actividad, tergiversando lo actuado y buscando la desestabilización del sistema de salud”.

La oficina de prensa del ISSN indicó que el 13 de febrero abonó los 8 millones de pesos que había solicitado el Colegio para cancelar la deuda correspondiente al 50% restante de septiembre y el 50% de octubre de 2013. Se precisó que la propia asociación había pedido, en una carta enviada el 7 de febrero firmada por la presidenta de la institución Silvia Ávila, que esta cancelación se hiciera el 17 de febrero.

En la misiva dirigida al administrador general Marcelo Berenguer se destaca que "con el objetivo de continuar con el cronograma de pagos elevado al ISSN, requerimos para el próximo vencimiento (17/02) se complete el 50% restante a la facturación de septiembre y el 50% de octubre de 2013”.

Es así que desde el ISSN explicaron que de acuerdo con "lo convenido con las autoridades del Colegio Médico de Neuquén, está previsto cancelar el 50% restante del mes de octubre de 2013 por la suma de 4.163.763, en el transcurso del presente mes".

Desde el Colegio Médico aclararon que por error omitieron poner el 50% de noviembre en la nota antes mencionada, aunque sí lo hicieron en cinco cartas presentadas con anterioridad, incluso el cronograma de pago se publicó en los medios en noviembre.

En una reunión de la comisión directiva, el Colegio resolvió implementar los jueves de febrero la atención por reintegro en reclamo de la deuda de unos $22 millones que mantiene la obra social con unos 650 profesionales. La decisión fue tomada argumentando que la situación es “grave” debido a la imposibilidad de poder cobrar por el trabajo realizado en “tiempo razonable”.