En estos días de verano, con altísimas temperaturas, el agua es mucho más que un bien preciado. Un grifo con agua es como un pequeño oasis en una casa. Sin embargo, el suministro de este servicio es irregular en distintos barrios del sur urbano. 

De acuerdo con una recorrida que Diario El Ancasti realizó por la zona sur de la Capital, en algunos barrios el líquido elemento viene casi a cuenta gotas o directamente escasea, mientras que en otros lugares viene a chorros y con buena presión.

En el barrio San Antonio Sur, uno de los más populosos de este sector, una vecina contó que a veces suelen estar varias horas sin agua y para conseguir un poco deben ir a buscarla a otros barrios como Las Mil Viviendas. Las necesidades son muchas, necesitan el agua tanto para lavar ropa como para cocinar. No obstante, en el verano las necesidades se multiplican. "Los niños tienen sed y quieren bañarse”, remarcó la misma mujer. Los cortes se prolonga por varias horas al día. "Cortan durante todo el día, hasta las 3 ó 4 de la mañana pero a las 6 ya vuelven a cortar”, indicó.

Al mismo tiempo, comentó que hace un par de días, en la noche y con calor, su hija pequeña quería bañarse pero desde hacía varias horas no había agua. "Tuvimos que ir a buscar agua a Las Mil y traer en tachos. Por suerte, unos vecinos nos dieron agua en botellas. Pusimos toda el agua en un tacho y recién se pudo bañar mi hija”, aseguró.

En otros barrios linderos, como el Jesús de Nazareth, en el sudoeste capitalino, el panorama es otro. Según contaron los residentes, en horas del mediodía, la presión del agua es muy buena. "Después, a la siesta, cuando uno más la necesita, merma y a las 20 la cortan. A la madrugada ya vuelve pero en el día tenemos que juntar el agua en tachos. Así es siempre, durante todo el verano”, remarcaron. 

Hacia la zona oeste, en barrios como Villa Cubas, Achachay, Ocampo y Apolo también suelen producirse cortes en el servicio de agua. "A veces cortan a la mañana hasta la tarde y otras veces a la siesta hasta la noche”, contaron. 

Ayer al mediodía, un grupo de vecinos residentes sobre el camino viejo al Dique El Jumeal, en Avenida Bartolomé de Castro al 1100, cortó este acceso en reclamo por la falta de servicio. Según contaron, se trata de nueve familias que, desde hace varios años, residen en este sector -en inmediaciones del Colegio de Abogados y el Club Mountain Bike- que desde el viernes al mediodía no tiene una gota de agua. "Todos los años pasa lo mismo. Estamos dispuestos a pagar el agua, aunque no tenemos medidores. La empresa se había comprometido a instalarlos en un piquete anterior hace un año. Hasta la fecha, no tenemos solución”, contaron.

Según los manifestantes, "este servicio es imprescindible”, dado que es necesaria para los niños fundamentalmente. "Algunos niños se enfermaron por la falta de agua. Les salieron hongos porque al no haber agua, no se los podía higienizar. Este servicio es imprescindibles, más habiendo niños y mujeres embarazadas, adultos mayores”, contaron.

El reclamo continuará por tiempo indeterminado, aseguraron. Si bien Aguas de Catamarca se comprometió ayer, al mediodía, a llevar agua en camiones, el inconveniente es que no todas las familias tienen un tanque de reserva. "Algunos, los que puedan, van a recibir el agua y los que no piden al menos agua mineral para tomar”, expresaron.

Suspensión temporaria

Por su parte, la Empresa Aguas de Catamarca SAPEM informó que para hoy se tiene programada una suspensión temporaria del servicio de agua potable. Este corte afectará el servicio en el Barrio Valle Chico de la Capital en el horario de 7 a 14. 

Según explicó la empresa, esta suspensión temporaria se debe a un corte programado de energía eléctrica que afecta el rebombeo de Ojo de Agua. A la vez, se recomienda que mientras dure la suspensión, utilizar el agua de los tanques de reserva solo para higiene y consumo.

En tanto que para el oeste, los vecinos del Dique El Jumeal continuarán con el corte sobre la Avenida Bartlomé de Castro si no llega una solución después de varios días sin servicio.