Ayer al mediodía quedó formalmente inaugurado el nuevo edificio de la Escuela 757 “Hipólito Yrigoyen”, una obra que tras año y medio de ejecución deja atrás los 28 años de clases dictadas a varias generaciones entre edificios “prestados” y antiguas gamelas de madera para empezar a escribir su historia en un edificio acorde a las necesidades de 800 alumnos.

El edificio se alza en el mismo predio de Petrolero San Lorenzo y Kunzel, donde históricamente funcionó el precario colegio del barrio General Mosconi, y que ahora supera los 2.300 metros cubiertos, en dos niveles, gimnasio incluido, que ayer se vio colmado con todos sus alumnos y profesores.

Las instalaciones fueron bendecidas por el padre Juan José Scotto di Betta y el pastor Benjamín Alvarado, precediendo el mensaje del director del colegio, Martín Vulcaín, quien recordó el derrotero edilicio de la institución hasta la inauguración de ayer, del edificio de material.

“Durante 28 años trabajamos para que este sueño se concrete” dijo, recordando otras instituciones que son parte de la historia del “Hipólito”, como el colegio Perito Moreno y el Deán Funes, que prestaron sus edificios entre 1984 y 1987, hasta que YPF cedió en comodato las dos gamelas donde se instaló definitivamente.

Resaltando que es en la educación pública donde están las esperanzas, anhelos y sueños de la comunidad educativa representada ayer, destacó el esfuerzo conjunto en la construcción de ciudadanía en este momento histórico de la república. Resaltó además que el edificio inaugurado es merecido por los alumnos, el barrio y la ciudad, en función de que “todo edificio educativo que se abre es una barrera contra la ignorancia, la intolerancia y el autoritarismo”.

Antes de sus palabras finales, Vulcan agradeció a los padres que integran la cooperadora, partícipes de la lucha por el edificio propio, a la ex ministro de Educación, Mirtha Romero, al equipo directivo actual y jubilados y a los directores de las instituciones que albergaron a la escuela durante los últimos dos años en que se extendió la obra del edificio: el Ceret y la Escuela 43.

“SOBRE LA MEDIA”

El ministro de Educación, Luis Zaffaroni, recordó a su vez que los orígenes del Hipólito Yrigoyen datan de 1979 cuando los distintos referentes barriales demandaban un colegio secundario estatal en General Mosconi, destacando las distintas juntas vecinales que impulsaron el proyecto. También reiteró el agradecimiento de Vulcan a otras instituciones huéspedes del Hipólito.

En otro orden, enmarcado en la coyuntura de reclamos docentes en la Regional Sur de ATECh, Zaffaroni resaltó el incremento de los presupuestos dedicados a la educación en materia salarial y de infraestructura. “En 2012 hablamos de un presupuesto histórico que supera largamente el de 2011. Es un presupuesto que demuestra en obras que tenemos mas de 1.200 millones invertidos, y un crecimiento en la masa salarial de 120 a 150 millones” especificó.

En tal sentido, enfatizó que Provincia pretende una educación secundaria exigente, inclusiva y de calidad, ponderando que Chubut camina sobre esos tres conceptos, hecho que subrayó ratifica la presencia por tercera vez en la provincia del titular de la cartera educativa nacional, Alberto Sileoni, que llega hoy a Esquel. “Si eso sucede es porque realmente estamos caminando con fortaleza por una educación de mucha calidad y muy por sobre la media”, subrayó.

HABLO BUZZI

El gobernador Martín Buzzi clausuró el acto destacando que la fuerte presencia de alumnos, vecinos e instituciones ayer en el gimnasio educativo, “marca claramente qué tan profunda era esta necesidad de tener un edificio propio, un lugar seguro donde los chicos vengan a la escuela todos los días”.

Lo dijo al recordar las viejas gamelas de chapa y madera de la que surgieron varias camadas de comodorenses con una buena formación en un pésimo edificio que incluía riesgos importantes, contraponiéndolas con las nuevas instalaciones que consideró, quitan la preocupación de infraestructura por los próximos 15 años para el crecimiento de la institución.