Por estos días, las estaciones de servicio han registrado dificultades para el normal expendio de combustible, sobre todo del gasoil, muy demandado en medio de campaña de cosecha.

“En este momento se viene un pico de demanda de gasoil. Hay cosecha de cereales, se termina la siembra de la soja, hay un montón de actividad productiva que, por el lado del mercado del gasoil a granel, produce un pico de demanda”, refirió Delfino

Ante este pico de demanda, la producción local no da abasto y las petroleras se encuentran con la necesidad de importar.

“La refinería local está trabajando al 100 por ciento, pero produce una cantidad de litros que no es suficiente, entonces hay que complementar con producto importado. El problema es que los precios internacionales, comparados con los precios internos, están muy retrasados y el que importa lo hace a pérdida. El componente importado genera pérdidas gigantescas”, aseveró el presidente de la cámara de expendedores de combustibles de Mar del Plata.

Asimismo, explicó que la única empresa privada que accede a importar el combustible a pérdida es YPF, mientras que Shell, Axion y Puma no están dispuestos a emprender este negocio ruinoso, que implica perder 30 centavos de dólar por cada litro que se vende, e implementan un sistema de cupos.

Finalmente, Delfino estimó que eventualmente se producirá un aumento en los precios, que reducirá la brecha que existe entre el precio del surtidor y el valor internacional y afirmó que: “Las empresas petroleras son como cualquier sindicato, cuando a un sindicato no le dan lo que quiere, para. Las petroleras son iguales, con este esquema ofrecen al mercado todo lo que pueden producir a nivel local y no traen nada de afuera, entonces cuando se acaba, se acaba y arréglate. La forma de hacer paro de una petrolera es volcar al mercado sólo el combustible que produce internamente”.