Los comerciantes gastronómicos realizan una "huelga a la japonesa" y continúan trabajando a pesar de las prohibiciones por la necesidad de generar un ingreso económico. Luego que en el Concejo quedara archivado el proyecto que habilitaba la gastronomía al aire libre, algunos incluso permiten el ingreso a sus salones.

"Ya no sabes para que lado arrancar, es una incertidumbre día a día. Esto pasó a ser un tema político a nivel municipal y provincial para autorizar actividades productivas. Dicen que si siguen los contagios no llegamos a la temporada, pero pasamos más de medio año con los locales cerrados. Piden esfuerzo de todos, pero hay que reactivar la economía", aseveró Esteban Rabini, comerciante gastronómico, en diálogo con Antes que sea tarde por Radio Mitre Mar del Plata.

Rabini, dueño de una parrilla, señaló con el clima de la ciudad en esta época es "imposible" atender al aire libre, por lo que trabajan puertas adentro.  "Hicimos una presentación judicial para que nos ampare el trabajo. El Municipio ya nos apoya porque se dan cuenta que tenemos tanta desocupación, y muchos gastronómicos y comerciantes están fundidos", agregó.

"Tomar la temperatura, los datos, distanciamiento de mesas, todo descartable, alfombra sanitaria, alcohol al 70%, alcohol en gel en cada mesa... Todo eso tiene un costo operativo, que ya implementamos. Para abrir un negocio tenés que invertir, es como una nueva inauguración. Es insostenible", señaló elcomerciante.

Por último, Rabini destacó el apoyo de los clientes, quienes son "realistas" con lo que esta pasando y muestran apoyo. "Hay gente con miedo por los contagios, pero hay que volver a la vida normal, tomando cada uno sus recaudos", concluyó.