La disposición se conoció en la tarde noche del viernes a través de un comunicado de prensa que, además de Alberto Roberti, fue firmado por quien lo sucede en el mando, Julio Miranda.

A través del mismo se argumenta que Rubén Retamozo “ha incurrido en conductas violatorias y contrarias a ley” por lo que se tomó la determinación de dar por finalizada su función “en forma inmediata”.

Cabe recordar que el citado dirigente fue secretario adjunto del destituido Héctor “Chaco” Segovia, del cual se separó antes que la Justicia Provincial, el Ministerio de Trabajo de la Nación y la Federación intercedieran para descabezar a la cúpula del gremio santacruceño debido a convulsionadas revueltas internas.

Federación nombró en principio como “interventor” a Carlos Flaquier y luego anexó rútulos de “normalizadores” a Rubén Retamozo para la zona de Caleta Olivia, a Juan Barrientos en Las Heras y a Pablo Méndez en Pico Truncado.

Pero poco antes de que esto sucediera, casi a fines de 2012, la entidad madre hizo desaparecer de escena a Flaquier sin dar a conocer ningún comunicado oficial.

Roberti y Miranda estuvieron en Caleta el 20 de noviembre de ese año, pero no llegaron para sumarse a un nuevo aniversario de esta ciudad, sino a “inaugurar” una inconclusa clínica maternal y una farmacia de la gerenciadora de salud del gremio.

En esa ocasión, Roberti ni se inmutó cuando Diario Patagónico le preguntó sobre la ausencia de Flaquier, en tanto que Miranda dijo escuetamente “ya fue, de ese no se habla más”.

“OVEJA NEGRA”

Ahora parece ser que Retamozo no cumplió con el régimen verticalista que impone la Federación y se convirtió en la “oveja negra” del grupo de normalizadores ya que también se enemistó con Barrientos y Méndez.

El detonante de ese enfrentamiento fue el hecho de haber encabezado una huelga de operarios de la empresa de perforación HP, contratista de Sinopec, sin el consentimiento del gremio madre y de sus pares normalizadores.

La tensión llegó a su punto máximo cuando hace pocas semanas la “sede” de Retamozo recibió un baldazo de pintura de color rojo y escritos amenazantes. El mismo atribuyó sospechas de ese atentado a Juan Barrientos, a quien tildó de “mafioso”.

El normalizador lasherense no sólo refutó las acusaciones sino que también denunció que, coincidentemente, también su propia sede tuvo ese tipo de agresión, al tiempo que calificó de ilegal el paro que impulsaba Retamozo.

Ayer por la mañana, tanto Barrientos como Méndez asistieron en Caleta Olivia a una segunda inauguración de la misma farmacia de la gerenciadora de salud del gremio, donde brindaron por ese acontecimiento, por la continuidad en sus cargos y sobre todo por la expulsión de Retamozo. Además, se cuidaron de no invitar a algunos medios periodísticos como Diario Patagónico y más tarde eludieron a través de terceros las solicitudes de requisitoria periodística.

“ILEGITIMO PROCECER”

A todo esto, vale señalar que en otro pasaje del comunicado emitido por Federación, se destaca que “el señor Armando Rubén Retamozo” también incurrió en conductas contrarias “a los estatutos, a las resoluciones de organismo federados y a los fines esenciales de normalización institucional y social a la cargo de la referida intervención”.

Al mismo tiempo hizo saber que “habiendo sido oportunamente notificado de todas y cada de las graves conductas imputadas a los fines del debido ejercicio del derecho de defensa, no solo ha mantenido silencio respecto de tales intimaciones sino que ha profundizado en los hechos su ilegal e ilegitimo proceder”.

Por ello, alega que “ante la necesidad de adoptar medidas urgentes de preservar la paz social en Santa Cruz la comisión directiva nacional ha resuelto suspender, apartar con efecto inmediato de su cargo de miembro de la comisión normalizadora a Retamozo, ad referéndum del primer Congreso General de delegados congresales” en tanto se lo deja cesante “de forma inmediata en toda función y atribuciones gremiales, administrativas y bancarias que estuviera realizando como miembro de la comisión”.