El evadido del Caso Roseo intentó suicidarse y ahora se encuentra en coma farmacológico

El evadido del Caso Roseo intentó suicidarse y ahora se encuentra en coma farmacológico
Luego de conocerse la detención del evadido Claudio Gómez que estaba cumpliendo una pena de prisión perpetua por el Caso Roseo en el Complejo Penitenciario II de Sáenz Peña, se supo ahora que intentó atentar contra su vida y se encuentra internado en terapia intensiva en el Hospital Masvernat de Concordia.
Así lo confirmó a NORTE el juez de la Cámara Segunda en lo Criminal Nelson Pelliza, al ser consultado al respecto señalando además que libró un oficio a la Fiscal de Entre Ríos que tiene la causa, para que le informe la situación concreta sobre la salud de Claudio Gómez.

Por otro lado señaló que apenas la doctora Liliana Lupi que investiga la fuga de Gómez recibió la comunicación de la recaptura informó a la Cámara Segunda de esas circunstancias.

Según se supo Gómez intentó quistarse la vida ahorcándose con una remera, pero pudo ser evitado porque en esos momentos ingresó al lugar un El guardiacarcel advirtió lo ocurrido y lograron bajarlo para ser trasladado al Hospital J.J. Urquiza de Federal, pero por lo delicado del estado fue derivado al Hospital Masvernat de Concordia, donde se informó en la noche del domingo que su estado de salud seguía siendo grave.

Al cierre de esta edición y así también lo informaba el doctor Nelson Pelliza, el estado era delicado, pero para saber concretamente el cuadro de salud del mismo había librado un oficio en horas de la mañana de ayer para conocer la situación del evadido.

Por su parte, ayer el procurador general Jorge Canteros confirmó que el homicida se manejaba en Entre Ríos con una “falsa identidad” y “trabajaba como remisero”.

Al descubierto

El jefe de los fiscales del Chaco -explicó a NORTE- que de acuerdo al reporte procedente de Entre Ríos, Gómez “se encuentra bien” y no “habría sido nada grave”. Mientras que el jefe de la Policía, Gustavo Peña detalló que el criminal “usó una camisa para colgarse”, aunque no reviste seriedad su cuadro.

La División Investigaciones a cargo del comisario principal Aldo Mendoza recibió un llamado desde la Jefatura Departamental de la ciudad de Federación en la cual se solicitaba información sobre si Gómez poseía pedido de captura a requerimiento de las autoridades policiales y judiciales de esta ciudad.

Gómez fue aprehendido en la vía pública durante un control de tránsito, aparentemente mientras conducía un automóvil en esa localidad entrerriana, donde al serle requerido el registro de conducir presentó uno con identidad falsa.

El intercambio entre los uniformados de esta ciudad con sus pares entrerrianos permitió establecer que en realidad el hombre que se identificaba como Diego Beltramino era, nada más ni nada menos, que el peligroso prófugo Claudio Alfredo Gómez, evadido desde los primeros días de este año del Complejo Penitenciario II de la termal.

Cuando los efectivos entrerrianos lo detienen y constatan inconsistencias en su documentación, Gómez confirma su identidad, la que es rápidamente cotejada por la fuerza policial que no tarda en descubrir la alerta por su fuga y pedido de captura originado en Chaco. Ante la posibilidad de haber dado con el prófugo, desde la Departamental de Federación se comunicaron con Investigaciones en Sáenz Peña, cuyo jefe solicitó el envío inmediato de la muestra de las huellas digitales del detenido, lo que sumado a las características físicas permitió determinar sin mayores contratiempos que se trata de Gómez.

Casi cuatro meses escondido

Gómez, uno de los condenados por el doble crimen de Manuel Roseo y Nélida Bartolomé, se había fugado en la madrugada del 3 de enero del Complejo Penitenciario II de Sáen Peña junto a otro recluso y en horas posteriores al escape fue intensamente buscado por autoridades penitenciarias y policiales.De acuerdo a la información brindada en aquel momento la fuga se habría producido alrededor de las 1.30 y con Claudio Gómez se escapó otro interno de apellido Acevedo.

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