El escribano Marcos Rospide se mostró gratamente sorprendido por la aplicación de distintas herramientas que se conjugaron para subdividir tierra en bloque con destino a resolver el problema habitacional de cientos de familias tandilenses. Además, dejó plasmado su compromiso de seguir apoyando este mecanismo y su deseo de difundirlo para que otras ciudades puedan replicar el modelo.

Una vez que los funcionarios provinciales culminaron con la entrega de un total de 507 escrituras y la firma de otras 560 en el Teatro del Fuerte, aceptaron la invitación del presidente del Concejo Deliberante Juan Pablo Frolik para conocer algunos barrios de las asociaciones y otros financiados por el Instituto de la Vivienda que alcanzaron la regularización dominial.

Guiados por Frolik, el escribano general Marcos Rospide, la escribana directora Silvina Vargas, la escribana delegada María Natalia Navas y el director institucional de la Escribanía General de Gobierno Gonzalo Torrado recorrieron el barrio 21 de Abril (exAmesya) y luego, los de Graduados, Pila Pila y Familia Judicial, ubicados en Segundo Sombra y Circunvalación.

En principio, el presidente del Legislativo local valoró que el escribano general le haya puesto tanta atención al acto de firma y entrega de escrituras, ya que se quedó dos días en Tandil y colaboró activamente con las tareas de su equipo.

La herramienta

Una vez que llegaron a la zona donde se están construyendo unas 90 viviendas (sobre 148 lotes) de la asociación civil Graduados Tandil, los integrantes de la comisión directiva Ignacio Carreras y Ariel Zubigaray le explicaron al escribano Rospide el camino que transitaron desde la compra de la tierra en bloque, hasta la escrituración y la ejecución de las casas. Además, celebraron que ya hay trece familias habitando y anunciaron que el número se multiplicará en septiembre, cuando se finalice la obra de la red de gas.

Esta herramienta que diseñó el Municipio comenzó con la formación de asociaciones civiles que compraron macizos de tierra y los donaron a la comuna para avanzar con la subdivisión a través del Plan Familia Propietaria. Una vez inscripto el plano en la Provincia y aprobado el loteo, se tramitaron los boletos de compraventa a nombre de cada asociado y se confeccionaron las escrituras.

En el caso de Graduados Tandil, el lugar era agreste, con un monte de eucaliptos y cerezos. Entonces, mientras avanzaban los trámites legales en la Provincia, los asociados comenzaron a llevar los servicios junto a sus vecinos de Pila Pila y Familia Judicial. Luego –la mayoría gracias al Procrear-, arrancaron a construir las viviendas.

Los integrantes de Graduados informaron que pagaron 5.700 dólares por cada lote de 16 por 28 metros y luego abonaron en cuotas otros 50 mil pesos para los servicios de luz, agua, cloacas y gas. Resaltaron que a esos valores es imposible comprar un terreno en Tandil.

Por otro lado, le explicaron a los funcionarios que las casas y lotes no se pueden vender ni transferir por un plazo de 5 años -como establece el Plan Familia Propietaria-, medida tendiente a evitar la especulación inmobiliaria. Es que el espíritu de estas organizaciones es que sus miembros trabajen en forma cooperativa para acceder al sueño de la casa propia.

Proyectan

comprar

más tierras

Durante la entrevista con el escribano, los representantes de Graduados Tandil anunciaron que están en negociación con los propietarios del macizo de tierra para comprar otras dos manzanas, a partir de la demanda de más tandilenses que sueñan con tener su hogar.

“Como jóvenes familias arrancando nuestra actividad laboral, la única manera de tener un pedazo de tierra era esta. Hemos pagado 5.700 dólares cuando un terreno así cuesta tranquilamente 20 ó 30 mil dólares. Y completamos con 50 mil pesos por los servicios que fuimos pagando a lo largo de estos cuatro años”, indicó Ignacio Carreras.

En tanto, Ariel Zubigaray agregó que el barrio “se potenció con el Procrear, que terminó de completar las posibilidades para muchas familias”.

“Tandil es el que

mejor lo aplica”

Por su parte, el escribano General de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires expresó que “tengo un mes de gestión. Es la primera vez que veo el fruto del trabajo. Uno en la Escribanía va viendo el proceso de cómo se va armando la carpeta, la escritura, cómo se va juntando la información, cómo se llega a los actos -hasta ahora hemos hecho varios de firma y de entrega-, pero estar in situ, terminar de entregar las escrituras y venir al barrio a conocerlo, permite ver el resultado final y es muy lindo”.

Marcos Rospide sostuvo que “la cantidad de escrituras que entregamos pone de manifiesto el trabajo de la Municipalidad en acompañar a la gente en todos estos proyectos, porque la verdad es que Juan Pablo Frolik trabaja muy bien en ese sentido, lo he corroborado en este acto, y la herramienta que le da la Municipalidad a los vecinos para poder hacerlo es fundamental”.

El funcionario evaluó que Tandil “debe ser uno de los municipios que mejor maneja esta herramienta que muchas otras ciudades ni siquiera conocen, y nosotros vamos a tratar de que sepan qué cosas pueden hacer para que esto se replique en otros lugares. Se ve que Tandil es el que mejor lo aplica, queremos que en otros lugares hagan lo mismo”.

Marcos Rospide comprometió su apoyo para que este proceso pueda continuar, siempre a través de asociaciones civiles. “Se puede seguir por este camino porque ya está aceitado el mecanismo, el Municipio tiene las bases, el conocimiento de las herramientas, y nosotros desde la Escribanía General de Gobierno vamos a seguir acompañando en el trámite final”, afirmó.