La comunidad de la escuela Cailén del barrio Vivero, recibió de manos de la intendente María Eugenia Martini cuadros de distinción por la elaboración del libro gigante de Bariloche, que estuvo expuesto en la globa del Centro Cívico durante la Fiesta de la Palabra que concluyó el domingo.

Así, los alumnos y docentes del Jardín Maternal Nº 30 —que funciona junto a la escuela— y de 1º a 7º grado de la escuela primaria recibieron certificados enmarcados, que fueron entregados por la jefa comunal, el secretario de Cultura municipal Rubén Fernández y la subsecretaria de Políticas Inclusivas Gabriela Letón. Acompañando a los chicos y los docentes estaban el director de la escuela, Alejandro Kuschich, la directora del Jardín Maternal Roxana Porcel, autoridades de la Junta Vecinal del barrio y la principal impulsora de esta iniciativa, la fundadora y presidente de la Asociación Aldea Infantil Nelly Panizza.

“Quiero felicitarlos por el trabajo y el esfuerzo que hicieron entre todos —expresó la intendenta Martini—, son un equipo fantástico y un gran ejemplo para todos”.

El libro, de 1,50 m de alto y confeccionado con una tapa artesanal de madera, fue el resultado de un trabajo conjunto por parte de docentes, alumnos, directivos, porteros y familias de la Escuela Cailén, perteneciente a la Asociación Aldea Infantil. Además, contaron con una gran cantidad de colaboraciones voluntarias, como las del músico e dibujante Chingolo Casalla, los escritores Luisa Peluffo y Sebastián Di Silvestro y el Secretario de Turismo Fabián Szewczuk, entre muchos otros.

Nelly Panizza explicó por qué surgió el proyecto de hacer el libro gigante: “La idea era motivar a los chicos para que quieran leer y venir a la escuela. Entonces había que buscar información para hacer el libro, y estuvimos trabajando casi seis meses. Ellos mismos no creían que lo iban a poder hacer, pero se hizo. No lo pueden creer, lo miran y se miran, y se dicen entre ellos «irá, yo estoy adentro de ese libro»”. El festejo terminó con unos ricos mates cocidos con medialunas.

Además, la intendenta realizó una recorrida por las instalaciones de la escuela, y tanto Panizza como Kuschich le contaron sobre los proyectos de ampliación del edificio, que incluyen una extensión de 220 metros cuadrados de superficie cubierta, abarcando cuatro aulas nuevas, un salón, baños y cocina. También están construyendo, con la colaboración voluntaria de vecinos solidarios, una serie de juegos de madera al aire libre, y se está comenzando con la reparación del invernadero. “Queremos que los chicos puedan hacer muchas cosas”, sintetizó Panizza.

La escuela Cailén, una institución pública de gestión social, cuenta actualmente con 88 alumnos entre jardín de infantes y primaria, a los que se suman cerca de 50 niños que asisten al Jardín Maternal Nº 30.