Desbaratan otra banda que pinchaba un oleoducto

Desbaratan otra banda que pinchaba un oleoducto
Extrajo desde Oldelval seis camiones de petróleo por un valor estimado en 400.000 pesos y tenía unos 90 barriles almacenados en tanques, hasta donde llegaba un caño de 400 metros.
La Policía rionegrina desactivó ayer una conexión clandestina desde donde se robaba petróleo en la zona de Dos Esquinas, en el norte de Cipolletti. Ayer a la tarde se allanó una chacra por donde pasa uno de los oleoductos de la empresa Oldelval, que transporta toda la producción de la cuenca Neuquina. Los responsables de la maniobra delictiva se fugaron antes de que llegara los policías. Presumen que movieron seis camiones que cargan cada uno alrededor de 180 barriles de petróleo a un precio total de mercado de unos 400.000 pesos.

El caño estaba pinchado por gente con conocimiento en soldaduras petroleras, desde donde partía un conducto de dos pulgadas que al cabo de algunos cientos de metros se transformaba en una manguera de tres cuartos. La investigación comenzó hace dos meses sobre la base de un rumor. Desde ese momento, la Policía realizó observaciones y pudo corroborar que el oleoducto estaba pinchado. Ayer el juez Gustavo Herrera autorizó un allanamiento y la Brigada de Investigaciones arribó al lugar en compañía de los responsables de la empresa. Con una máquina retroexcavadora, desenterraron el oleoducto y descubrieron que el caño estaba pinchado. Desde ese lugar se iniciaba una conexión clandestina que recorre unos 400 metros hasta el otro extremo de la chacra, donde estaban semienterrados dos tanques con una capacidad de 15.000 litros cada uno. Al momento del allanamiento, cada uno de los tambores tenía 7.000 litros de petróleo. La Policía secuestró todas las herramientas y mantuvo una fuerte custodia en la chacra.

Surge de la investigación que los ladrones de petróleo habrían conseguido extraer seis camiones de crudo. En cada uno habrían trasladado unos 180 barriles, cuyo precio en el mercado (los delincuentes actuaban evidentemente en un mercado negro) es de unos 75 dólares por barril. El cálculo permite inferir que el costo de lo sustraído alcanza los 400.000 pesos.

Los autores de la maniobra delictiva sabían cómo hacerlo porque la conexión clandestina contaba incluso con un aparato de un registro de presión. Cuando llegó la Policía, no estaban los responsables de la chacra. Había una familia que enseguida buscó desvincularse del tema. Fuentes judiciales difundieron que se emitió una orden de captura y que esperan detener a los ladrones de petróleo en las próximas horas.

El Oleoducto del Valle transporta toda la producción de petróleo de la cuenca Neuquina que no es procesada en las refinerías de la región. Tiene varios puntos de carga pero todos confluyen en Allen, desde donde sale un solo caño hasta Puerto Rosales, en Bahía Blanca.

Lo que transporta es lo que en la jerga petrolera llaman "sopa": crudo de todas las empresas que explotan yacimientos en Neuquén, Río Negro, La Pampa y sur de Mendoza.

El oleoducto se concesionó en los 90 a un consorcio, llamado Oldelval, con sede en Cipolletti y liderado por la brasileña Petrobras.

Cada día en la cuenca Neuquina se extraen 37.000 metros cúbicos de petróleo crudo que es tratado en las plantas que las empresas tienen en sus campos para extraerle el gas asociado y el agua.

Comentá la nota