Desde el comienzo de la guerra interna, en marzo de 2011, 27.379 personas murieron en Siria . Las cifras fueron entregadas ayer por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), que también informó que casi 20.000 de ellas son civiles.

Mientras, en la ciudad de Aleppo se registraron ayer dos ataques con decenas de muertos y heridos, por los cuales tropas oficiales y rebeldes se acusan mutuamente.

El nuevo informe fue difundido por el presidente del OSDH, Rami Abdel Rahmane, quien además dijo que del total de muertos 1.113 son desertores y 6.767 soldados de las tropas del presidente Bashar al Assad. Agregó que la cantidad de víctimas mortales “puede incrementarse porque son numerosos los heridos”. El último informe del OSDH, del 23 de agosto, había registrado 24.495 muertos.

Fuentes de la oposición reportaron un ataque aéreo “con decenas muertos y heridos” en un barrio residencial de Aleppo, la capital económica del país que disputan las fuerzas rebeldes y el ejército de Damasco. El bombardeo destruyó un edificio en el barrio Hananu, uno de los distritos de la zona este bajo control rebelde.

Por otro lado, la agencia oficial Sana informó que en el barrio del estadio municipal, cerca del hospital central de Aleppo, un atentado “terrorista” (como denominan a las acciones opositoras) con bombas causó la muerte de 17 personas y más de 40 heridos.

También en un ataque contra un ómnibus que une las ciudades Sirias de Homs y Massyaf, centro del país, se produjo “un número aún no determinado de muertos”, informó la TV estatal. La misma fuente acusó a un “grupo terrorista” de haber colocado la bomba.

El general Mustafa al-Sheikh, jefe del consejo militar del opositor Ejército Sirio de Liberación, destacó en declaraciones reportadas por la cadena Al Arabiya la unidad de las fuerzas rebeldes que operan en el interior del país.

“Cuatro meses es el tiempo máximo si consideramos los daños irreversibles que hemos infligido al ejército regular”, para vencer a las tropas de Assad y provocar su derrocamiento, sostuvo. La caída del presidente puede producirse incluso “en dos meses”, agregó, y destacó que las tropas de Damasco “solo alcanzan a atacar vía aérea o con tanques, pero es verdaderamente difícil para las fuerzas de tierra cercar las ciudades”.

En tanto, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, advirtió que Washington y Rusia mantienen posiciones alejadas en la estrategia para la resolución de la crisis siria y advirtió que son pocas las expectativas de un acuerdo .

“Debemos ser realistas, no vemos del mismo modo la crisis siria y es posible que continúe así”, dijo Clinton tras un encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin, y el canciller Serguei Lavrov, al margen de la reunión del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). La jefa de la diplomacia estadounidense consideró inútil avanzar con una resolución de la ONU que no tenga fuerza para imponer consecuencias concretas, ya que Assad la ignoraría.

El nuevo mediador de la ONU para Siria, Lajdar Brahimi, llegó a El Cairo, donde iniciará sus contactos con la Liga Arabe. Brahimi intentará una nueva misión de paz tras el fracaso de Kofi Annan.