A más de un año de la desaparición de Fernando Lario son más las incógnitas que las certezas. Este viernes se realizó un festival de bandas para exigir Justicia e impedir que el insólito hecho del arquitecto marplatense del que no se sabe nada desde julio 2012 caiga en el olvido.

“Tenemos angustia, tristeza, desesperación, desolación y también alegría, porque en este camino hemos encontrado gente de primera que nos da una mano todo el tiempo y que realmente son unos grandes”, contó ayer Laura Lario, hermana del arquitecto desparecido hace más de 13 meses.

A minutos del inicio del festival musical, organizado frente a la Facultad de Arquitectura -donde Lario concurrió durante 26 años entre la docencia y el alumnado-, Laura informó que a más de un año de la misteriosa desaparición “no hay ninguna pista”.

“No queremos que se olviden de mi hermano. Yo no sé a esta altura si lo voy a encontrar vivo o muerto, pero yo no voy a descansar para que la gente no se olvide nunca de él”, expresó.

A su entender, la falta de datos sobre el paradero de Fernando no tiene un por qué. “No es que no lo buscan, pero lamentablemente no encuentran absolutamente nada”, dijo.

“Mi hermano no se fue, no huyó”. “Lo conozco a mi hermano y no necesitaba irse”, dijo su hermana descartando una de la hipótesis principales de la causa.

“Si se hubiera ido le hubiese avisado a cualquiera, porque toda la familia siempre fue muy confidente. A él le habían ofrecido un posgrado en Italia y no se fue por su hijo, que tiene 13 años y se pregunta todos los días que pasa con el padre”, analizó.

MISTERIOSA DESAPARICIÓN

Fue visto por última vez el sábado de 7 de julio de 2012 después de las 14 cuando salía dela Facultad de Arquitectura, en Funes y Peña. A partir de allí, su paradero es una incógnita cargada de hipótesis sin pistas.

Fernando Lario era un reconocido arquitecto y docente. Aquel sábado representó en las elecciones del claustro docente a la lista opositora que resultó vencida. Se habría ido a pie, ya que su único vehículo, una motocicleta de marca italiana, estaba en reparación desde hace un mes en un taller mecánico.

Posteriormente se estableció que debía ir a visitar a su hijo menor de edad para ayudarlo en una tarea escolar de cara a un examen de matemáticas. Sin embargo a partir de su salida dela Universidad, nada se supo de su paradero.

Horas más tarde, efectivos policiales hallaron en el kilómetro 536 dela Ruta 11 una mochila con el DNI y otros objetos. Fue el último dato concreto que se sumó a la causa.

Las hipótesis se mantienen firmes en materia de investigación: suicidio, homicidio o huida repentina. Hace más de un año que Fernando Lario está ausente.