Caso Judith Palma: familiares de la nena asesinada exigen justicia

Caso Judith Palma: familiares de la nena asesinada exigen justicia
Piden una condena ejemplar para los asesinos de la niña, quien mañana habría cumplido 10 años. Se oficiará una misa.

La vida de la familia Palma cambió radicalmente ese fatídico 18 de mayo del año pasado. Y con ellos la vida de todo un pueblo también.

La violación y asesinato de la pequeña Judith Palma, de tan solo nueve años, enmudeció y enlutó a J.V.González.

Los Palma ya no son los mismos. El atroz crimen de Judith quedará marcado para siempre en sus corazones. Exigen una condena firme y ejemplar para los asesinos de su hija, que habría cumplido 10 años mañana 25 de febrero.

“Queremos que antes del año de la muerte de mi hija se haga efectiva la condena de los asesinos. Así podremos estar tranquilos todos. Si bien ello no nos devolverá la vida de nuestra hija, nos sentiremos serenos al saber que cayó sobre ellos todo el peso y el rigor de la ley por lo que hicieron”, manifestó a El Tribuno Antonia Avelina Quiroga, la mamá de Judith.

El abrazo de la comunidad

La familia, de condición humilde, recibió la ayuda de cientos de vecinos y autoridades varias luego del calvario que les tocó vivir.

Por la difícil situación económica de la familia, el papá de Judith, Fabián Héctor Palma (33), fue tomado como empleado de planta en la Municipalidad de González en agosto del año pasado.

Es de público conocimiento que Fabián Palma debía ausentarse del hogar para trabajar en una finca a 130 km del pueblo. Se trata de una situación muy común y que se repite en varias familias por la falta de trabajo en los pueblos de la zona.

Fabián estaba trabajando lejos de su casa cuando ocurrió el asesinato de Judith.

Hoy el contar con un ingreso seguro llevó tranquilidad a toda la familia, ya que además de la estabilidad económica, Fabián puede trabajar cerca de su casa, lo que cambio la vida de Antonia y sus hijos.

“Agradezco todas las colaboraciones y el acompañamiento de la comunidad. Nos sentimos queridos y protegidos por todos”, manifestó Antonia.

Cabe mencionar que desde el Ministerio de Derechos Humanos de la Provincia se le otorgó a los Palma un subsidio de $2.000 que fue efectivizado el año pasado.

Por su parte, Antonia contó que reciben apoyo psicológico constante en el hospital local.

A su vez, la comunidad de unió para ayudar a los palmas a ampliar y mejorar la humilde vivienda en la que habitan los papás de Judith con sus cinco hijos.

El expárroco del pueblo, Hugo Molina, los ayudó económicamente para colocar el piso de la cocina y de una habitación, que eran de tierra. “Su apoyo espiritual fue único para nosotros”, señaló Antonia.

También se está ampliando el frente de la casa y se construirán más habitaciones con la ayuda de la comuna, que les aporta los materiales de construcción.

En tanto varios familiares colaboran con la mano de obra para realizar las modificaciones.

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