Carbón Blanco: Gorosito dijo que era testaferro de Julio Grondona

Carbón Blanco: Gorosito dijo que era testaferro de Julio Grondona

En la apertura del juicio, en Chaco, admitió que "trabajaba" para el ex presidente de la AFA; después, aseguró a LA NACION que el club que él había fundado era, en realidad, del dirigente fallecido

"Yo era testaferro, o como quieran llamarlo, de Julio Humberto Grondona", asegura Patricio Gorosito, uno de los cinco imputados en la causa por el contrabando de más de mil kilos de cocaína a Europa conocida como Carbón Blanco.

Acababa de terminar la primera jornada del juicio oral que comenzó ayer aquí, en la que el empresario futbolístico santafecino caído en desgracia y los otros cuatro acusados, entre ellos, el abogado porteño Carlos Salvatore, se abstuvieron de declarar. Pero en su breve paso por el estrado, Gorosito dejó flotando una insinuación sobre su relación con Grondona, quien falleció el 30 de julio del año pasado.

"¿Antes de quedar detenido a qué se dedicaba?", le preguntó el presidente del tribunal oral federal, Rubén Quiñones, en el prólogo de su declaración. El hombre obeso y calvo, al que le cuesta moverse y que cayó preso en Barcelona en marzo de 2012, contestó: "Trabajé para el señor Julio Grondona. Llevaba jugadores a Arsenal". Tras esas preguntas formales, y sus lacónicas respuestas, Gorosito, dijo que se abstendría de dar testimonio. Regresó tambaleándose a su lugar, y volvió a dormitar. En la extensa lectura de la elevación a juicio de la causa, el otrora crédito de Arroyo Seco peleó contra el sopor, pero no pudo contener el sueño.

La frase de Gorosito quedó dando vueltas en el aire y encerraba el interrogante: ¿Por qué nombrar a Grondona? Dos horas después de que terminara la primera jornada del juicio, LA NACION habló con el acusado de ser jefe de una asociación ilícita, junto con Salvatore, para el contrabando de cocaína a España y Portugal.

Sentado en una silla que parecía endeble ante el peso que debía soportar, Gorosito admitió que era "testaferro" y "amigo personal" del ex presidente de la AFA. "El club Real Arroyo Seco era de él. Era de Julio Grondona. Cuando se lo vendí a Rosario Central la plata se la llevó él y yo me quedé con algo", reveló este hombre de 67 años que fue procesado el 28 de julio de 2013. Hasta ahora se conocía que mantenía una "amistad" con el ex vicepresidente de la ahora vilipendiada FIFA, aunque había sospechas de una relación más "fluida". Y que el negocio del fútbol habría sido uno de los canales por donde la plata del narcotráfico circuló para "limpiarse".

"Yo puse la cabeza por Grondona. Él hizo el estadio en Arroyo Seco, donde iba siempre. Estuvo una vez con Joan Laporta", entonces presidente del Barcelona. Cuando pasaba el tren me tenía que subir. ¿Qué querés que haga?", afirmó Gorosito, quien admitió haber llegado a manejar "108 jugadores", entre ellos, según él, al uruguayo Víctor Piris Alves (de variopinto paso por varios clubes de primera y del ascenso argentino, y última escala en Barracas Central, en el torneo de la C) y Germán Denis, actualmente en Italia. "Hay un montón más. Otro día lo cuento", promete.

Pero usted fue quien vendió el predio de aquel club a Rosario Central en 2008.

Grondona vendió el club por 16 millones de dólares. Él se quedó con la plata y me dio una parte.

En 2003 Gorosito empezó a construir el predio de Real Arroyo Seco junto a la autopista Buenos AiresRosario; en un terreno de 21 hectáreas edificó un estadio para 12.000 espectadores, un hotel cuatro estrellas y siete canchas profesionales con iluminación artificial. La construcción de ese club sin socios ni hinchada, que competía en el Argentino A, estuvo a cargo de Constructora Deportiva SA, propiedad de Genaro Aversa, yerno de Grondona.

El 4 de octubre de 2006, Gorosito firmó un acuerdo con el Barcelona. Su presidente, Laporta, fue a Arroyo Seco y le dio la camiseta N° 10, la de Messi, con la inscripción "Gorosito" en la espalda. Él le dio la naranja del "Real", con la publicidad del restaurante "Katrina". No es un detalle menor: en el expediente de Carbón Blanco II, donde se investiga el supuesto lavado de dinero del narcotráfico, Katrina figura como un restaurante que Salvatore poseía en Puerto Madero y que llegó a tener una sucursal en Miami. Se sospecha que en ese tiempo Gorosito y Salvatore ya tenían una fluida relación. En el expediente 170/2012 se señala que la banda empezó a traficar droga a Europa en 2005.

En junio de 2008 Gorosito vendió el club a Rosario Central por 16.100.000 dólares. El acercamiento entre Gorosito y el entonces presidente "canalla" Horacio Usandizaga lo había tejido el ex jefe de la policía de Santa Fe Ricardo Milicic. El titular del inmueble no era formalmente Gorosito, sino la sociedad financiera internacional Bavella SA, radicada en Montevideo. El predio estaba gravado con dos hipotecas a favor de la firma Conort SA. Tras acordar el precio, la escritura se firmó cerca de las dos de la madrugada en la escribanía del vicepresidente de Central Alfredo Buhler, que falleció en 2009. El club pagó una cuota de 2,5 millones de dólares y el resto en 40 pagarés que Gorosito vendió a la financiera Autocredit SA..

 

Comentá la nota