El cálculo de estructura no lo hizo un profesional

El cálculo de estructura no lo hizo un profesional
Estuvo a cargo de un estudiante de Ingeniería que ayer declaró como testigo.
La persona que hizo los cálculos de estructura originales del edificio donde funcionaba la Cooperativa Obrera no tiene título habilitante. Es un estudiante de ingeniería que aprobó 28 materias, la última de ellas en 2009, al que le pagaba el empresario Néstor Guerrero. Sus cálculos los firmaba el arquitecto Alberto Diez. Ambos están imputados y detenidos en el derrumbe del 25 de octubre que causó 7 muertos.

Sobre el edificio de Godoy y Ortega y Gasset, y sin que exista aún constancia de que se hayan hecho nuevos cálculos, se estaban construyendo diez departamentos. Las columnas y vigas del edificio de la planta baja sucumbieron por el peso provocando la catástrofe.

El calculista, como se lo llama entre los investigadores y cuya identidad no trascendió, declaró ayer como testigo ante el juez Mauricio Zabala con la presencia de la fiscal Sandra González Taboada y de los defensores de los imputados Martín Segovia (por Guerrero), Orlando Funes (h) (por Diez) y Pablo Gutiérrez (por José Silva, capataz de la obra).

Respecto de los defensores, ayer presentaron un nuevo recurso para que los tres imputados sean puestos en libertad. El escrito ya está en la Cámara Provincial de Apelaciones, que resolverá en breve.

A través de fuentes allegadas a la investigación se supo que el calculista tiene una larga relación con Guerrero y con Diez, y que les hizo los cálculos para otras construcciones del empresario. Al declarar como testigo aclaró que sólo hacía "esquelas" y no "memorias de cálculo" que son más minuciosas.

Las mismas fuentes explicaron que el testigo hizo los cálculos del edificio original donde funcionaba el supermercado, que se construyó en 2009, y según relató "le dijeron que tenga en cuenta que arriba iría una construcción liviana".

Por "construcción liviana" definió que "no llevaría losa", como sí tenía el edificio.

Respecto de los diez departamentos que se estaban construyendo sobre esa losa, los investigadores señalaron que "debió hacerse un nuevo cálculo de estructura" pero "hasta ahora no hay registro de que se haya hecho".

Añadieron que "tampoco hay planos de los departamentos, sólo un croquis".

De acuerdo con la información reunida por ahora por la fiscalía, el empresario Guerrero "iba seguido a la obra (de los departamentos) y daba directivas, mientras que Diez le bajaba las órdenes a Silva, quien tenía un grado de autonomía limitado".

En cuanto al calculista, cuya computadora fue secuestrada a los pocos días del derrumbe, recibía pagos de Guerrero por su trabajo mientras que el que los firmaba era el arquitecto Diez.

Hoy habrá una nueva ronda de testimoniales en el juzgado, con la presencia de los bomberos que hicieron la primera pericia.

Comentá la nota