La brutal violencia que caracteriza al alperovichismo se manifestó una vez más, justo a la hora del cierre de los comicios.
Les robaron un bolso y golperaron con dureza a Luis, a quien le quebraron el húmero y le provocaron fuertes golpes en la cara.
Acto seguido, llegó una camioneta con vidrios polarizados, que desde hace días venía siguiendo y espiando a la candidata radical. Los ocupantes se rieron y les preguntaron "¿les pasó algo"?.
Los agredidos están siendo atendidos en el Sanatorio del Norte.
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