El equipo alternativo de Boca Juniors se dio el gran gusto del verano ante las estrellas de River Plate.Después de un año donde el "Millonario" se mantuvo invicto en los 8 clásicos y lo eliminó de la Copa Sudamericana, el "Xeneize" cortó esa racha adversa con un sólido 1 a 0, en un José María Minella colmado, para quedarse con la Copa "Julio Humberto Grondona".

Buen triunfo de Boca, en medio de un clima que no venía siendo el mejor, luego del 1-4 ante Racing, incorporaciones que se fueron dilatando y un presidente "en la mira" por los hinchas. Arruabarrena tuvo grandes respuestas en sus suplentes, que jugaron con entrega, sacrificio, concentración, y altos rendimientos individuales (Pablo Pérez como estandarte).

Boca impuso condiciones en el primer tiempo. El equipo de de la Ribera salió decidido a llevarse por delante a River, con presión en campo contrario, jugadores atentos para anticipar, generando imprecisiones en un River que no podía hacer pie con la pelota. Y contó con jugadores "enchufados" como Pablo Pérez (cara nueva), el pibe Cubas, Carrizo y Pavón (estos dos, por las bandas, complicando a Mercado y Vangioni).

Pero Boca lo que hacía bien en tres cuartos de cancha, no lo traducía en situaciones de riesgo, sin ingenio para llegar hasta Barovero. Y River, casi abre el marcador a los 14 minutos: atacó por derecha, Burdisso despejó corto, Teo Gutiérrez dejó solo a Pisculichi, que definió displicente y el debutante arquero Guillermo Sara tapó su remate.

Hasta que tres minutos después, Boca llegó por primera vez seriamente, y fue efectivo. Por derecha combinaron muy bien Pavón y Fuenzalida, con una pared, y el chileno mandó el centro que sobró a todos; Carrizo cedió atrás para Pablo Pérez, quien eludió a un rival en gran maniobra y puso la pelota al medio para el juvenil Cristaldo, quien dominó y definió con un derechazo fuerte, al palo derecho de Barovero, que alcanzó a tocar la pelota pero sin éxito. Festejado 1 a 0 del "Xeneize".

River intentó reaccionar, pero no tuvo claridad para generar juego. Pisculichi estuvo bien rodeado, y solo Carlos Sánchez intentó aportar algo de claridad con su despliegue.

Boca, a los 23´, se aproximó con un centro rasante de Carrizo que Gigliotti logró anticipar ante Barovero, pero el arquero se repuso y desvió al córner. Diez minutos después, otra vez con el exRosario Central como lanzador de un tiro libre, Pablo Pérez apareció por detrás de todos, pero demoró su remate y fue tapado por un defensor.

En los quince minutos finales el encuentro perdió intensidad. El juego se tornó friccionado, con muchos amonestados (4 de Boca, 2 de River). El equipo de Arruabarrena perdió a uno de sus jugadores desequilibrantes, Cristian Pavón, posiblemente fracturado en un dedo por una entrada de Vangioni. Burdisso se abrió el rostro con un corte, y también el encuentro se detuvo. River terminó apretando con un par de envíos, pero no logró llegar al empate.

El segundo tiempo tuvo a River en busca de la reacción. A los cinco minutos Gallardo mandó a la canchaal debutante Gonzalo Martínez (exHuracán) por Mercado, en un cambio ofensivo. Pero Boca no se desacomodó nunca, incluso tampoco cuando quedó con diez hombres por la expulsión del volante Cubas (dudosa segunda amarilla), a los 14 minutos. Antes, a los 8´, Rivero cantó un gol anulado a Mora, por posición adelantada.

River tuvo superioridad numérica durante quince minutos, pero siempre fue impreciso. Los centrales Pérez y Burdisso, más Colazo en el lateral, estuvieron muy atentos en los anticipos y cierres para la defensa boquense. En el mediocampo, Pablo Pérez se impuso con su presencia. En ataque, el equipo de Arruabarrena quedó lejos del arco de Barovero, de contragolpe, sin lograr algún ataque certero por esa vía. El chico Vadalá corrió más de lo que jugó.

El "Millonario solo contó a los 20´ con un tiro libre de Pisculichi que se fue apenas por encima del travesaño. Gallardo sacó a Mora por Cavenaghi, y justo llegó la doble amarilla a Vangioni (28 minutos). 

Desde entonces y hasta el final, diez contra diez, Boca fue un equipo siempre compacto. River, impotente y sin juego, solo dependió de arrestos individuales. A los 34´ llegó por última vez: combinaron Gutiérrez y Cavenaghi, quien entró al área e intentó definir de zurda y cruzado, en un disparo muy débil que contuvo Sara.

Incluso, Boca pareció estar más cerca del segundo tanto. Pero desperdició varios contragolpes: a los 40´ Carrizo alargó para Colazo (de grandísimo despliegue), quien cambió de frente para Cristaldo, pero el "héroe" de la noche remató muy fuerte y desviado. Y a los 45´ el juvenil Pochetino remató desde afuera, cruzado y desviado.

Boca festejó en Mar del Plata, River se fue preocupado porque lejos estuvo de su mejor versión. La supuesta disparidad de nombres no se notó, y el equipo de Arruabarrena pudo darse una alegría, horas antes del choque ante Vélez del miércoles para ingresar a la Copa Libertadores, con la esperanza de que el 2015 sea más fructífero en materia de éxitos.