Por: Corina Díaz.

Las celebraciones navideñas aumentan la ingesta de refrescos o bebidas gaseosas y provocan la aparición de enfermedades como la anemia y la osteoporosis, porque la cafeína y los ácidos que contienen estas bebidas dificultan el proceso de absorción de hierro y calcio en los huesos.

Estudios científicos revelan que los refrescos son bebidas perjudiciales para la vida de los seres humanos, debido a su alta capacidad de deteriorar la Salud, motivo por el cual es necesario evitar consumirlas o ingerirlas en exceso.

Las bebidas gaseosas son una mezcla de agua filtrada, edulcorantes y dióxido de carbono, es cierto que contienen un agradable sabor, pero hay que saber tomarlas con precaución.

En medio de las celebraciones de la Navidad, muchas son las ocasiones en las cuales los platillos típicos se acompañan de estas bebidas y es necesario saber identificar la capacidad que tienen de deteriorar la salud y, muy especialmente, si se toman de manera excesiva.

Algunas investigaciones científicas relacionadas con el consumo de bebidas gaseosas indican que pueden provocar la aparición de dolencias de la salud como: dolores de cabeza, arritmia cardíaca, ansiedad, depresión, náusea o vómitos, temblores, micción fuerte, insomnio y disminución de densidad de la masa ósea por baja absorción de calcio, entre otras enfermedades.

Vigilar el consumo de refrescos en los niños previene enfermedades

Aun cuando se conocen las desventajas que implica el consumo excesivo de refrescos, mucha gente olvida no consumirlos en grandes cantidades durante las fiestas tradicionales navideñas.

Igualmente, es necesario vigilar la cantidad de refrescos que ingieren los niños durante las fiestas, porque no son invencibles ante los efectos dañinos que ocasionan estas bebidas azucaradas. Entre estas dolencias se encuentran: las caries, gases, diarrea y trastornos del sueño.

Siempre será mejor tener a disposición durante las celebraciones de la Navidad grandes jarras de jugos naturales, los cuales son un ingrediente perfecto para la elaboración de cocteles sanos, por su agradable sabor.

Los contenidos nutricionales de los jugos naturales superan en gran medida a los aportes para la salud de las bebidas gaseosas, especialmente si contienen azúcar.

El sobrepeso y la osteoporosis aparecen, tras el consumo excesivo de refrescos

Uno de los problemas de salud que provoca la ingesta excesiva de gaseosas es el sobrepeso, porque se estimula un aumento de los niveles de consumo de azúcar en la sangre, además de una inflamación del páncreas y la aparición de diabetes.

La pérdida de la masa ósea también se encuentra entre los daños a la salud que provocan los refrescos, porque los ácidos y la cafeína presentes en estas bebidas perjudican el esqueleto e interfieren en el proceso de absorción de calcio en los huesos, seguidamente ocurre la pérdida de la masa ósea y aparece la osteoporosis. Se ha comprobado científicamente que la combinación de azúcar y ácido dificulta el proceso de absorción de hierro.