Bárbaro recordó que en el año 2011, el INYM anticipó un proyecto para la compra de colectivos en buen estado con el fin de terminar con la inseguridad en el traslado de los tareferos a los yerbales, pero el anuncio “quedó solo en eso, cuando debería haber sido una prioridad para los directores que cuentan con el dinero suficiente como para mejorar radicalmente las condiciones de precariedad en la que viven y se trasladan los tareferos, el eslabón más vulnerable y olvidado de la cadena de comercialización de la yerba mate”.

“Se olvidan del tema hasta que los tareferos y sus hijos vuelven a dejar la vida en las rutas teniendo la solución en sus manos”, refirió.

Además agregó responsabilidad al Instituto “porque nunca logró su cometido de lograr precios justos para la yerba, y encima no controla que se cumplan los precios que se laudan en Nación por debajo de las expectativas de los productores, lo que sigue alimentando el círculo de inequidad del que son víctimas productores chicos y los tareferos”.

“Esta es la gran discusión de fondo en Misiones que muchos quieren esquivar. Se buscan responsables en el cuadrillero, en el productor, en el secadero, en el gobierno que no controla, en el Ministerio de Trabajo, y seguramente todos tienen en sus espaldas el peso de estas muertes en la ruta, pero si se sigue evitando la discusión de fondo sobre la rentabilidad de los productos de la chacra nunca vamos a terminar con colonos pobres y tareferos sometidos a esclavitud laboral”, finalizó.