Más de cinco años pasaron de aquel asalto comando en la empresa Dorita SA, nombre de la firma Ivess en Posadas. Un grupo armado irrumpió en la planta embotelladora y del sector administrativo se llevó más de 150 mil pesos, dos teléfonos celulares y otros objetos. Pese a que en agosto del 2022 se presentó el requerimiento de elevación a juicio, las apelaciones de las defensas dilataron más de un año el auto de elevación a debate oral y público, firmado el jueves último y que recaerá en el Tribunal Penal 1 de Posadas con la imputación de “robo agravado por el uso de arma de fuego”.

Fuentes en contacto con PRIMERA EDICIÓN confirmaron que el jueves 9 de noviembre el juez de Instrucción 3, Fernando Verón, finalmente firmó el auto de elevación a juicio en el cual juzgarán a cinco correntinos de entre 29 y 42 años.

La causa en la que intervino la fiscal Adriana Marcela Verónica Herbociani, tiene a cinco sospechosos imputados por “robo agravado por el uso de armas de fuego” y si bien llegarán al debate en libertad, porque en 2019 se dictó el cese de prisión preventiva por vencimiento de plazos y prórrogas, los correntinos podrían afrontar penas de hasta 15 años de prisión según lo previsto en el artículo 166 del Código Penal Argentino.

El robo ocurrió cuando al menos tres hombres encapuchados con trapos (remeras) se robaron más de 150 mil pesos, dos teléfonos celulares y otros elementos de la embotelladora para escapar en un Renault Logan negro. Presumen que los dos restantes integrantes de la banda, aguardaron en el vehículo.

 

A MANO ARMADA. Una de las pistolas del asalto era robada a un policía.

Los investigadores del momento establecieron que los delincuentes hicieron inteligencia previa desde el departamento que alquilaba uno de los detenidos, en ese momento estudiante de Arquitectura, quien residía muy cerca del lugar.

Empuñando armas de fuego, intimidaron a varios empleados para llevarse el dinero que estaba previsto para el pago de los trabajadores. También despojaron a varias víctimas de dinero, teléfonos celulares, joyas y otros objetos.

Todos los sospechosos son oriundos de Corrientes y cuatro de ellos fueron detenidos pocos minutos después del golpe cuando intentaron abordar un taxi cerca de la Terminal de Ómnibus de la capital misionera, ubicada sobre la avenida Santa Catalina.

Momentos antes, testigos observaron cuando los sospechosos descartaron algunos elementos en un terreno baldío del barrio San Francisco de Asís, específicamente entre las calles 71 y 130. En ese lugar, cuatro de los maleantes se bajaron del Renault Logan, se cambiaron de ropa y caminaron hacia la Terminal de Ómnibus en busca de un taxi.

Llegaron a ellos gracias a la geolocalización de uno de los teléfonos celulares sustraídos en el robo. El 11 de junio de 2018, capturaron al quinto sospechoso en Santo Tomé cuando conducía el mencionado Logan negro.

Como parte de la investigación, se supo que una de las armas utilizadas en el asalto pertenecía a un policía correntino a quien le habían robado la pistola Browning 9 milímetros, secuestrada durante la detención de los primeros sospechosos al igual que el celular Samsung J7 de mención, una pistola Bersa calibre 45 milímetros y un revólver Smith además de 95 mil pesos que guardaban en cuatro mochilas.

En su momento allanaron el departamento que rentaba uno de los sospechosos, justo frente a la planta embotelladora y allí se supo que estudiaba Arquitectura en Posadas. En dicho inmueble secuestraron una computadora y 1.400 pesos y 150 dólares.