Ante este panorama la presidenta de la asociación, Marcela Murgia, a través de un documento dio cuenta de que “el chalet ha sido declarado de utilidad pública y sujeto a expropiación por ley de la provincia del Chaco, cuya constitucionalidad no ha sido cuestionada y conforme a las exigencias constitucionales y la ley 5746 se encuentra tramitando ante la justicia provincial el juicio de expropiación”.

“En el marco del proceso de expropiación la provincia del Chaco ha tomado posesión efectiva del chalet, no habiendo sido tampoco cuestionada, por lo tanto la situación actual no guarda ninguna relación con el sucesorio al que se han referido los medios periodísticos y que el reconocimiento que existiere a alguna persona de su carácter de heredero forzoso de Julio C. Perrando únicamente incidiría en la determinación de quién tendría derecho a percibir las sumas por la expropiación del inmueble, pero sin que ello incida en la titularidad del bien”.

El inmueble

Desde la asociación indicaron que existe y está constatado el estado de ruina del chalet declarado patrimonio provincial, y el peligro de derrumbes en el mismo, que trae aparejado el riesgo de vida de los que se encuentran allí, situaciones en las que se viene trabajando intensamente para paliar.

En relación con esto último, informaron que a la fecha resultó imposible el comienzo de las tareas de apuntalamiento, restauración y recuperación del chalet Perrando para los fines por los que fuera concedido el préstamo de uso gratuito (Centro Cultural) “debido a situaciones legales que involucran a la ocupación de la propiedad por dos personas”.

Mencionaron que en lo que hace a esa ocupación se están llevando a cabo todas las acciones necesarias para su cese, encontrándose inclusive en sustanciación sendas acciones judiciales con esa finalidad.

Sin resultados positivos

Aclararon que desde la firma del comodato “la Asociación ha puesto de sí todo lo que ha estado en el marco de sus posibilidades reales en pos de una solución que propiciara el comienzo de la restauración del Chalet Perrando, haciéndolo por demás mediante la búsqueda de caminos pacíficos y conciliadores. Pero ello ha sido desvirtuado por las personas que actualmente se encuentran en el inmueble, quienes frente a los incansables intentos igualmente se han mostrado reticentes articulando pretensiones excesivas de las que no resulta obligada la asociación ni tampoco la provincia del Chaco”.