Ángeles Rawson: el médico que hizo la autopsia dijo que no hubo ataque sexual

Héctor Konopka afirmó en el juicio que la adolescente tuvo una agonía de 12 horas

El médico forense que hizo la autopsia de Ángeles Rawson ratificó ayer en el juicio oral y público contra Jorge Mangeri sus conclusiones respecto de que la adolescente murió aplastada en el circuito de la basura, que tuvo una agonía de 12 horas y que no encontró lesiones que indiquen una agresión sexual.

Se trata de Héctor Konopka, quien durante su declaración ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 9 llegó a cuestionar la capacidad académica de los diez colegas suyos del Cuerpo Médico Forense (CMF) que luego, en una junta médica, desacreditaron sus conclusiones.

Según la agencia de noticias Télam, el tanatólogo que la noche del 11 de junio de 2013 practicó la autopsia sobre el cadáver de la víctima hallado en la planta de la Ceamse de la localidad bonaerense de José León Suárez, se presentó como un médico que hace 35 años practica autopsias y siete de ellos dentro del CMF.

El forense inició su declaración testimonial recordando que partió de la hipótesis de que la víctima "había sido violada" y que había sido "sofocada con una bolsa" que tenía en la cabeza, según lo que le informó vía telefónica la fiscal Paula Asaro acerca de lo sugerido por los médicos policiales que levantaron el cadáver de la joven.

A la hora de ser concreto y contestarle al presidente del tribunal, el juez Fernando Ramírez, sobre cuál fue la causa de muerte de la joven estudiante, Konopka afirmó que fue una "muerte por aplastamiento" en la que la víctima sufrió una "asfixia traumática".

El forense afirmó que llegó a esa conclusión ni bien abrió el cuerpo y advirtió que presentaba "quince fracturas en las costillas" y que todas eran de carácter "vital".

Konopka también describió que halló una "fractura doble de la clavícula" y que todas "superan la capacidad humana de producción".

Incluso, siempre según informó la agencia Télam, llegó a decir que por el estado en el que se encontraba el cadáver, en algún momento de la autopsia supuso que "podría ser un accidente de tránsito".

También explicó que el cadáver sufrió un aplastamiento en dos direcciones, una "anteroposterior" y la otra "lateral".

"NEURONAS ROJAS"

Para Konopka, la presencia de lo que se llama "neuronas rojas" en el hipocampo de la víctima fue un signo inequívoco de que "hubo una agonía" de, al menos, "12 horas".

En este punto y a preguntas del abogado querellante Pablo Lanusse, Konopka intentó ridiculizar a los diez integrantes del CMF que luego en una junta médica lo contradijeron y descartaron la agonía prolongada al afirmar que Ángeles Rawson había muerto estrangulada y sofocada en una maniobra que no duró más de cinco minutos.

"La neurona roja es una pregunta de tercer año. La tomo yo. Me queda la duda de que mis colegas hayan aprobado la materia", dijo entre risas, en un comentario irónico que le valió el reto del juez Ramírez.

Además, el legista aseguró que no fue posible distinguir lesiones provocadas con anterioridad a que el cuerpo sea introducido al circuito de la basura. "El aplastamiento pudo enmascarar otras lesiones", manifestó.

A preguntas del fiscal Fernando Fiszer, el médico forense admitió que había una lesión en el cuello, pero descartó que sea producto de un estrangulamiento.

Al referirse a las lesiones paragenitales en los muslos, que para la junta médica fueron evidencia de un ataque sexual, Konopka dijo que "eran secundarias al aplastamiento".

Sin embargo, al responder preguntas de la querella, Konopka tuvo que admitir que esas lesiones eran compatibles con una agresión sexual, aunque aclaró que en este caso no halló intercambio de fluidos ni lesiones en genitales ni zona perigenital..

Comentá la nota