Por su parte, el dirigente del Polo Obrero, Aurelio Díaz, denunció que hay una gran cantidad de trabajadores que fueron echados (la semana pasada fueron despedidos 23, con lo que llegan a 150) por la empresa que anteriormente gerenciaba y que el Estado no los reincorporó. “En el Toba están faenando una vez por semana, trabajan 50 obreros y se faena de 50 animales”, indicó en diálogo con la misma emisora.

“Para que la gente sepa este frigorífico faenaban 300 animales diariamente. Acá hay un elemento monopólico como es el frigorífico Vicentin que quiere imponer un precio en la carne de la región y entonces desde diciembre tiene paralizada las actividades y tiene la carne desde afuera o manda a faenar a otro frigorífico”, afirmó.

“Acá hubo un compromiso de parte del gobernador por compañeros nuestros de que nadie iba a ser echado. Se iba a trabajar normalmente. Se esperó febrero, marzo, abril y en mayo se hizo una gran movida a nivel provincial y se volvió a instalar el tema del frigorífico Toba que iba a comenzar a funcionar”, indicó. “Ahora lo toma con esta Fiduciaria y lo único que hizo fue terminar de echar la semana pasada a 23 compañeros. Los compañeros anteriormente echado le pagaron el 10% de la indemnización y estos compañeros se negaron a auto-echarse. Les decían que renuncien a la empresa Toba para ingresar a la nueva. En definitiva no ingresaron a la nueva, nuestros compañeros que no renunciaron siguieron cobrando la garantía horaria y ahora la empresa Toba los echó sin ningún miramiento. Lo que vamos a hacer es pedirle al gobernador que cumpla con su palabra”, afirmó.

El ministro de Industria, Sebastián Agostini, reconoció que la planta frigorífica Gran Chaco que está gerenciada por el gobierno provincial, no está trabajando al tope de su capacidad debido a que recién se está comenzando a impulsar la actividad tras meses de paralización del exfrigorífico Toba.