La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) detectó que un comercio ubicado en plena peatonal Dufaur, en la ciudad bonaerense de Monte Hermoso, tenía a parte de sus trabajadores sin declarar y al resto los había declarado como si sólo cumplieran media jornada, cuando en realidad lo hacían durante la jornada completa.
También, gracias a tareas periféricas y de investigación que realizó la AFIP previo al inicio del operativo, se detectó la maniobra de cambio de titularidad del negocio al comienzo de la temporada de verano.
El contribuyente se encontraba categorizado dentro del Monotributo - Categoría F (categoría ésta con un monto de ventas mensuales brutas estipulado en $ 8.000) y tiene su local ubicado en plena peatonal Dufaur.
La AFIP desarrolla controles impositivos y previsionales en la ciudad de Monte Hermoso a comerciantes de todas las actividades, en el marco del OPERATIVO DE VERANO 2013.
Mediante estos procedimientos de control, se detectó que los ingresos del local fiscalizado superaron -en sólo una semana- los montos máximos de ventas anuales ($ 96.000) establecidos para permanecer en el régimen monotributista. Por esta razón se procedió en forma inmediata a su exclusión, con lo que el titular de la explotación pasó a revestir la condición de contribuyente del Régimen General.
Con respecto a la parte previsional, en el mismo local se efectuaron controles de personal y se descubrió que los empleados estaban registrados como trabajadores de media jornada cuando, en realidad, desarrollaban sus tareas durante la jornada completa. A su vez, la cantidad de personal declarado resultaba insuficiente para el desempeño de la actividad.
Como consecuencia de las acciones llevadas a cabo por AFIP, el contribuyente regularizó a sus empleados, pasándolos a declarar por jornada completa y dando de alta una mayor cantidad de trabajadores, brindándoles a todos ellos los beneficios completos de la seguridad social que les corresponden.
El control, que tiene alcances en lo impositivo y previsional, está siendo desarrollado por unos treinta inspectores. El objetivo principal es que todos los contribuyentes que realicen o vayan a realizar actividades en la ciudad balnearia se encuentren dentro de las normas.
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