Se conmemora hoy el Día Nacional e Internacional de las Personas con Discapacidad, tal como fue declarado por la Ley Nº 25.346 en el año 2000. 

En la jornada de hoy se invita a la reflexión y toma de conciencia sobre las oportunidades de inclusión, de promoción de la accesibilidad y la eliminación de todo tipo de barreras sociales para las personas con discapacidad, al conmemorarse el Día Nacional e Internacional de las Personas con Discapacidad. 

En los últimos años ha crecido significativamente –o se ha visibilizado también– el número de personas con discapacidad en la provincia de Entre Ríos y a nivel nacional. Según estadísticas de colectivos que luchan por obtener mayores derechos, en Argentina más del 12% de la población tiene algún tipo de discapacidad. 

El vocal primero de la Agrupación Discapacitados de Entre Ríos (Adiser), Raúl Ricardo López, consideró fundamental reflexionar “acerca de lo que se está haciendo para que algunas discapacidades se puedan prevenir, porque buena parte de las discapacidades están relacionadas a los accidentes viales, que son uno de los pilares de los causantes de discapacidad y muerte en nuestro país y en la provincia”, puntualizó. 

Argentina es uno de los países que más normativas tiene con respecto a las personas con discapacidad, “pero debemos admitir que tenemos muchas leyes que no son respetadas y el desarrollo de una persona con discapacidad depende del respeto de esas normativas, pero sacamos conclusiones negativas que no llegan a permitir la autonomía y la independencia de una persona con discapacidad”, lamentó. 

Consultado acerca de las cuestiones diarias que debe afrontar una persona con discapacidad, López dio cuenta de los serios inconvenientes que presentan las obras sociales, que incumplen con las prestaciones que están determinadas por ley. “Cuando una persona con discapacidad tiene que ir golpeando puertas para que le provean una medicación, su calidad de vida se deteriora aún más”, subrayó en declaraciones a El Diario. 

En otro orden, ahondó en el sistema educativo que apunta a la inclusión, pero a veces esa inclusión a ultranza pone en riesgo no respetar los tiempos de cada persona, por lo que en lugar de mostrar una integración total se propicia el fracaso de una personas que no está en condiciones de seguir los tiempos establecidos. 

“La discapacidad implica siempre un deterioro y un punto de partida desfavorable, si la persona tiene además un revés educativo, se retrasa aún más”, opinó. “La relación integración – inclusión debe estar monitoreada por especialistas, teniendo en cuenta la participación de los padres y la familia, quienes también deben tomar conciencia de la persona de la que son responsables, que deben respetar y seguir el ritmo de cada uno de ellos, algo muy necesario para su desarrollo”, agregó. 

“Generalmente la discriminación se nota cuando uno tiene dificultades para llegar a la justicia porque no existen los medios ni accesos adecuados. Una persona sorda no tiene un intérprete que pueda escuchar sus reclamos, que pueda interpretarlos correctamente; ni hablar de la infraestructura, hay personas que no puede acceder a edificios para hacer un trámite común”, contó. 

Cuando se habla de accesibilidad para personas con discapacidad no sólo se hace referencias a las rampas, también al acceso a Internet, una herramienta muy valiosa para todos ellos. “Para quienes tenemos discapacidad visual, Internet es un elemento fundamental para la comunicación e integración social, pero hay páginas oficiales que no son accesibles, ni hablar del transporte público de pasajeros”, cuestionó. 

Inclusión laboral 

Las personas con discapacidad tienen derecho a la inclusión laboral y a la integración al mercado del trabajo, “pero lamentablemente también queda un deuda pendiente porque las oportunidades no son las que corresponden a pesar de que estamos sobrados de leyes”, cuestionó Raúl López. 

“Hoy, la persona con discapacidad tiene que aspirar a una pensión graciable, no contributiva, que no es descartable si constituye una ayuda cuando la personas no puede desarrollar una tarea, pero cuando sí se siente en condiciones el incentivo debe llegar desde el Estado, la familia y el mismo entorno; y para ello debe estar la oportunidad a mano y ahí es cuando nos retrasamos”. 

López valoró las actitudes de muchos ciudadanos, que consideró que “ha evolucionado en el trato hacia quienes tienen alguna discapacidad, y eso es gracias a la difusión que los medios de comunicación le dan a los diferentes temas que nos tienen como protagonistas; hay personas que no saben cómo actuar y eso tiene que ver con la falta de información, por ello, los medios de comunicación son una herramienta muy útil para todos nosotros”, enfatizó. 

Raúl López padece de ceguera desde los 9 años y su inclusión laboral se desarrolló con muchos problemas, pero logró tener su profesión y para él estudiar fue un logro que lo muestra orgulloso, porque en ello tiene mucho que ver la voluntad, la capacidad pero también la oportunidad que recibió de la sociedad. 

“Soy profesor de Francés y desarrollo tareas en el nivel medio, secundario y en la modalidad especial en la que precisamente cumplo la función de tratar de integrar a los alumnos con discapacidad visual en el idioma extranjero; es uno de los logros que he tenido para ayudar a personas en mi misma condición y avanzar en la vida y sobre todo llegar a una autonomía, que suena como una utopía, pero si se toma la decisión se puede llegar a lograr”, aseguró.