La votación de Mendoza sirve para explicar el futuro de Cambiemos

La votación de Mendoza sirve para explicar el futuro de Cambiemos

El amplio triunfo de Rodolfo Suárez le sirve a Mauricio Macri pero también le da aire a Alfredo Cornejo, uno de sus críticos internos más persistentes.

 

La elección del gobernador de Mendoza ya es pasado, pero su resultado puede ser determinante para lo que viene. Es la provincia más importante de las tres que gobernará el radicalismo y, si los resultados de las PASO en Buenos Aires y la Capital Federal se repiten, será la segunda más poblada de las que gobernará Cambiemos. El contundente triunfo de Rodolfo Suárez le dará a su mentor, el actual gobernador Alfredo Cornejo, el impulso para mantenerse en los años que vienen como uno de los dirigentes más importantes de la alianza que, si los resultados de las PASO nacionales se repiten, dejará la Casa Rosada en diciembre.

El mismo Cornejo suele decir en Mendoza que, si se impone Alberto Fernández el 27 de octubre, Mauricio Macri se correrá de la política y el posmacrismo quedará en manos de Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal, quienes tendrán que trabajar para mantener unido a Cambiemos junto con el futuro diputado mendocino y los gobernadores Gerardo Morales y Gustavo Valdés, además de otros dirigentes radicales como Martín Lousteau. Morales y Lousteau estuvieron en Mendoza, y Rodríguez Larreta mandó una mini delegación de funcionarios para que lo represente, encabezada por su ministro de Gobierno, Bruno Screnci Silva.

Si lo que hoy es el oficialismo nacional se convierte en la oposición, la principal tarea que tendrán esos dirigentes será la de mantener unidos los interbloques de Cambiemos en el Senado y en Diputados.

 

En el caso de que Macri conserve el caudal de votos que obtuvo en agosto, esos espacios tendrán un tamaño muy apreciable, pero Cambiemos deberá conseguir un nuevo pegamento que lo mantenga unido. A esa altura, incluso en el caso de que Macri sume apoyos que lo esquivaron en las PASO, es muy probable que ya haya quedado claro que la aversión al kirchnerismo es un motivo poderoso pero a todas luces insuficiente. En el macrismo hay funcionarios pensando en la mejor estrategia para construir un discurso que les permita sobrevivir en la intemperie a algunas de las ideas que quiso imponer Macri hasta la tormenta de agosto. “Si no mejoramos el resultado y después no mantenemos los bloques nuestras ideas van a quedar fuera de toda discusión durante 15 o 20 años”, dice uno de los funcionarios que más se acercó al Presidente en los últimos meses.

El resultado mendocino sirvió también para confirmar las ventajas que otorga ser oficialista. De las 16 elecciones para gobernador que se habían hecho hasta ahora, sólo dos pasaron a manos de los opositores: Santa Fe y Tierra del Fuego. Todo indica que eso también ocurrirá en Buenos Aires, en donde los votantes castigados por la crisis económica responsabilizaron por igual a Macri y a Vidal. Hasta las elecciones generales para presidente, habrá dos comicios más: las PASO salteñas, el 6 de octubre y la general para la gobernación chaqueña, una semana más tarde.

 

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