El camino se encuentra allanado para que nuestra provincia avance nuevamente en su pretensión de obtener el visto bueno por parte de los Estados Unidos para que el país del norte permita el reingreso de los limones tucumanos a su circuito mercantil, situación vedada, pues se aduce que la materia prima foránea no cuenta con las normas fitosanitarias necesarias para ser importada por EEUU.

Sin embargo, desde Argentina, se sostiene que esta actitud responde más bien a un lobby concretado por los agricultores californianos quienes se mostraron contrariados ante la posibilidad de que se produzca una competencia entre ambos tipos de fruta, siendo que la calidad de los limones de esa región no se asemejaría a los óptimos estándares reflejados por el citrus tucumano.

En sendas reuniones que mantuvo el embajador argentino, Jorge Arguello en suelo norteamericano, se trazaron los lineamientos principales de lo que será a inicios de la próxima semana la visita del gobernador José Alperovich y una amplia comitiva a la mayor potencia económica mundial.

Así, el diplomático mantuvo contactos con el presidente del condado de Los Ángeles Zev Yaroslavsky, a quien entre otros temas, expuso la situación de los cítricos argentinos. El embajador expresó en la reunión que el principal objetivo de su estadía de cuatro días a la costa oeste estadounidense "es lograr acuerdos con los productores californianos, procurando una solución que sea beneficiosa para ambas partes", según comentó.

De este modo, Arguello expresó que la motivación de esta incursión obedece al trabajo que viene siendo desarrollado "para lograr un mayor equilibrio en la balanza comercial siendo que no se trata de comprarle menos a Estados Unidos si no necesariamente encontrar los caminos para venderle más".

Como se recordará, ambas naciones negociaron durante seis años hasta que fue producida la apertura del mercado a los limones en 2000, no obstante, trece meses después, una decisión judicial suspendió las exportaciones que durante el 2001 habían alcanzado los 13 millones de dólares.

En tanto, en 2005, los dos países reiniciaron las negociaciones sobre aspectos técnicos que desde entonces continúan llevando adelante el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) y el SENASA, institución que en 2011 entregó al gobierno norteamericano un trabajo de monitoreo comprobando la inexistencia de enfermedades en los limones nacionales.

Fines de año, la fecha

En relación al viaje que llevará a cabo Alperovich, se indicó que la comitiva argentina desarrollará reuniones el lunes con oficiales del Departamento de Estado y con miembros del sector privado estadounidense, mientras que en su segundo día mantendrán encuentros con los Comités de Agricultura del Senado y de la cámara Baja del congreso y con oficiales de la Oficina Comercial de Estados Unidos (USTR, sus siglas en inglés).

La llegada a la capital estadounidense de los funcionarios y de los representantes del sector privado argentino, es la continuación de la visita que realizó el Embajador a finales del mes de marzo a Tucumán donde recorrió junto a ellos establecimientos de productores de limones.

Ese esfuerzo conjunto, es seguido esta semana en California - estado responsable del 96 por ciento de la producción estadounidense de limones con 0,832 millones de toneladas - con reuniones que mantendrá Argüello junto a productores locales.

Según lo estimado por uno de los integrantes de la misión, el presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), Roberto Sánchez Loria, las "negociaciones están en un período casi definitivo en la que sólo restan algunas cuestiones fitosanitarias, para luego avanzar en las negociaciones políticas".

Paralelamente, consideró que "nosotros creemos que en poco tiempo más, antes de fin año, estaremos realizando los primeros envíos. Entendemos que este es un proceso largo, de muchas negociaciones y algunas complicaciones. Venimos desde 2001 con el mercado totalmente cerrado y si bien hubo cuestiones sanitarias que arreglar y adaptarse a los requerimientos, ya estamos en condiciones de poder cumplirla", sostuvo el empresario.

Vale indicar, además, que el Instituto Agronómico de Paraná (Iapar), de Brasil se encuentra en la etapa final del estudio que lleva a cabo para demostrar que las semillas de limón no son transmisoras de CVC (Clorosis Variegada de los Citrus), la última exigencia fitosanitaria impuesta por el Aphis (organismo sanitario de EEUU) para autorizar el retorno de la fruta argentina. En los monitoreos trabajan la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) y el INTA.

Alperovich arribará a los EEUU en compañía del ministro de Economía provincial, Jorge Jiménez, su par de Desarrollo Productivo, Jorge Feijoo y el ministro de Coordinación, Jorge Gassenbauer.

A su vez, formarán parte de la visita Sánchez Loria y los directores de las compañías privadas Citrusvil, Daniel y Pablo Lucci; el presidente de Argenti Lemon S.A., Álvaro Bulacio; el gerente general de Citromax, Lucas Fornaciari; el director general de San Miguel, Romain Corneille y su director de Relaciones Institucionales Lucas Méndez Trongue y el presidente de Pablo Padilla S.A., Pablo Padilla.