El proyecto del parque Iberá, en Diputados

El proyecto del parque Iberá, en Diputados

La Cámara de Diputados dará ingreso hoy al proyecto de ley que viene con media sanción del Senado, referido a la creación de un parque nacional en los esteros del Iberá. La iniciativa corresponde al senador Sergio Flinta (UCR-ECO), y será girado de inmediato a las comisiones respectivas, junto a los otros temas que tomarán estado parlamentario.

El tema está incluido en el expediente Nº 11.368. Se trata de un proyecto que cede jurisdicción para la creación de un Parque y Reserva Nacional del Iberá.

La cuestión ha merecido debates y opiniones extraparlamentarias. Ayer, el intendente de Ituzaingó, el peronista Oscar Piñón, se mostró de acuerdo con el proyecto (ver página 5).

El diputado oficialista por el Partido Popular, Javier Sáez no descartó que haya modificaciones en el proyecto. "De acuerdo a la exposición, el proyecto puede tener algunos cambios pero no tendríamos porqué oponernos", expresó.

"Es algo histórico para Corrientes. Son tierras que hoy están en manos norteamericanas y van a pasar a manos del Estado nacional. La Provincia no debe ceder nada", indicó el legislador.

Por su parte, el senador Sergio Flinta, autor de la iniciativa, insistió con que la ley que contempla la creación del parque nacional sobre los campos de la Fundación Conservation Land Trust (CLT) y dos reservas nacionales también sobre propiedades de Tompkins, no implica que Corrientes pierda territorio y no se afectarán derechos privados.

"Donde estén los propietarios privados no va haber modificaciones en sus actividades ni en sus tierras", aseguró.

Flinta es el impulsor del Plan Maestro del Iberá y afirmó que el parque provincial se mantendrá como hasta ahora, al igual que la reserva provincial del Iberá.

En respuesta a las críticas a su proyecto, ponderó que el Iberá Integrado será el parque de mayor extensión del país; con un hábitat restaurado, con la mayor biodiversidad y único en reintroducción de especies.

También desmintió que el proyecto que ya cuenta con media sanción del Senado votado por unanimidad, chocara contra la Constitución provincial en temas referidos al ambiente.

Con la creación del parque nacional se conformará un área protegida pública de 700.000 hectáreas con múltiples accesos para el desarrollo local de todos los municipios que rodean al Iberá.

El Gobierno explica que la fundación donante ha expresado su voluntad de dejar un legado y que de no ser parque, estas tierras podrían ser vendidas a otro privado, lo que supondría una enajenación.

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