Se llevó adelante el primer paso para la concreción de la planta de procesamiento de tomate, con la licitación de la obra de construcción de la fábrica que generará puestos de trabajo y agregará valor a la cadena productiva de San Juan.

Con la planta en funcionamiento, las mil hectáreas de tomate que se producen actualmente en el territorio sanjuanino, y se industrializan en Mendoza, Córdoba y Buenos Aires, dejarán de hacerlo y el valor agregado de la cadena de comercialización se extenderá beneficiando a pequeños y medianos productores. Por ese motivo, el ministro de Producción y Desarrollo Económico, Andrés Díaz Cano, expresó: “La fábrica será la solución para los productores primarios para completar la cadena de valor y el circuito económico y puedan producirlo, industrializarlo y comercializarlo en San Juan”.

Sobre la mano de obra que creará, detalló que se dará en dos etapas: “En la primera será por la construcción y calculamos que serán más de 100 puestos de trabajo, mientras que en la etapa de producción se lograrán unos 50 puestos fijos más los temporarios, siendo cerca de 200”.

En el marco de apertura de sobres, el gobernador de la Provincia, Sergio Uñac, destacó la importancia que tendrá tanto en la economía local como en el impacto social por la generación de fuentes de trabajo y, en ese sentido, señaló la necesidad de brindar herramientas desde el Estado para fomentar el crecimiento del sector privado.

“Debemos incorporar valor agregado a la provincia; toda materia prima que llevemos a otra provincia o a otros países implica menos oportunidades de trabajo para los sanjuaninos. Por ende, pretendemos que el sector privado sea el que pueda generar el tipo de inversión”, manifestó al mismo tiempo que agregó: “Hoy la renta financiera es mucho más importante que la renta productiva, colocar plata en el sector financiero a una tasa que ronda el 30% atenta directamente contra el riesgo que implica invertir en producción, tomar trabajadores y esperar a que la rueda funcione”.

Por esas razones que detalló, resaltó las medidas que se emprendieron en su gestión, de modo que las inversiones se realicen, con el acompañamiento del Gobierno. “Es por ello que el estado debe otorgar todas las herramientas básicas. Primero, la crediticia y, en un año y medio, hemos puesto 1.200 millones de pesos en créditos con tasas subsidiadas en un convenio inédito y estratégico con el Banco San Juan. 9,95% es la tasa que nosotros promocionamos para que el sector privado pueda tomarla y genere inversiones y a partir de allí pueda crecer el empleo”, explicó y añadió: “La segunda herramienta básica es que si el mercado no puede proponer infraestructura productiva para tratar la materia prima en la provincia, el Estado lo va a suplir en la medida que pueda, como en esta oportunidad”.