Para José Zuccardi, "hay sectores y funcionarios que no comprenden la dinámica del sector vitivinícola"

Para José Zuccardi,

"La vitivinicultura en el mundo gira en torno a los equilibrios entre lo que se consume y lo que se produce y éste esquema algunos sectores en Mendoza lo entendieron", afirmó el empresario.

El empresario y dirigente vitivinícola José Alberto Zuccardi se refirió a la presión de algunos sectores de la industria en la región para derogar la Ley que da origen al histórico acuerdo entre Mendoza y San Juan para destinar cada año un porcentaje de la producción a otros destinos, con el objetivo de mantener los equilibrios del sector.

Zuccardi advirtió que "el acuerdo entre Mendoza y San Juan ha sido una herramienta muy valiosa que tiene absoluta vigencia y se ha ido perfeccionando a través de los años con el objetivo claro de mantener los equilibrios del sector".

El empresario reconoció que el acuerdo regional no pudo cumplir su meta durante 2014, cuando por una errónea estimación de cosecha y malas decisiones políticas -en los gobiernos de Francisco Pérez y José Luis Gioja- y ese combo generó excedentes vínicos.

Concluyó que "hay sectores y funcionarios que todavía no comprenden la dinámica del sector vitivinícola. La vitivinicultura en el mundo gira en torno a los equilibrios entre lo que se consume y lo que se produce y éste esquema algunos sectores en Mendoza lo entendieron. Desde la década de los 90´, la provincia trabajó en una profunda reconversión y en mecanismos para promover sus exportaciones". Aseguró que "la clave es insertarse en los mercados produciendo cosas que generen interés", y agregó, "los mercados no se manejan por decreto".

El dirigente tiró a la mesa de debate dos asuntos claves y estructurales para la industria. Dijo que "estamos en un momento en donde la vitivinicultura necesita profundizar su reconversión y cada región debe encontrar su lugar básicamente en los mercados". Por otro lado, se refirió a la problemática de los espumosos y aseguró que "grabar con impuestos a éste sector sería absurdo y atentatorio contra la cultura de los argentinos y contra la economía de las regiones vitivinícolas del país".

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