Gregorio Dalbón, el controvertido abogado de la ex presidente Cristina Elizabeth Fernández de Kirchner, analizó el procesamiento de la Cámara Federal por la causa de dólar futuro y afirmó que en el supuesto escenario de que su clienta vaya presa, "le llevaría masitas, bombones y el agua mineral que a ella más le gusta".

"A mí no me gustaría que la metieran presa. No sería justo. Haría todo lo posible para recuperar su libertad. Pero la iría a ver, le llevaría masitas, bombones, el agua mineral que a ella más le gusta y estaría todo el tiempo a su disposición porque me parece una mujer íntegra. Pero estamos hablando de un supuesto. Es algo imposible porque no hay mérito en ninguna de las causas", afirmó el letrado en declaraciones al programa radial Dame una Señal, por AM 770.

Fiel a su habitual estilo, Dalbón apeló con ironía al reciente procesamiento de la Cámara Federal a la ex presidenta por la causa de dólar futuro. Advirtió que el sistema judicial "no se va a animar a elevarlo a juicio oral" debido al "miedo que tienen de perder la credibilidad".

"La Cámara está actuando de buena fe. Lo que está haciendo es poner de manifiesto la irregularidad y arbitrariedad de Bonadio para que en un juicio oral se abra la causa de tal manera que la sociedad entienda que hay causas que no son judiciables", advirtió el abogado.

Y agregó: "Si se llegara a elevar la causa a juicio oral, yo pediría que vayan al Teatro Colón para que la gente vaya y disfrute del espectáculo. Van a salir absueltos todos y el que va a salir condenado será Bonadío, que va a perder el cargo si esto va a oral".

Respecto a la causa Hotesur, Dalbón reconoció que Cristina conocía de hacía tiempo a Lázaro Báez aunque rechazó la acusación de que ellos eran socios.

"Por supuesto que no se puede negar que Lázaro Báez era conocido de Cristina. Pero lo que ella dice es que ellos no eran socios. La relación que tenía Lázaro era con Néstor, no con ella. Era amigo del esposo de Cristina", dijo el abogado a Dame una Señal.

A su vez, Dalbón destacó que, desde el primer momento que inició su relación con Fernández de Kirchner, no dudó de su inocencia ante lo que se le acusa: "Lo que me pasó con Cristina es que la vi cristalina, la vi pura y la vi real. Una mina que estuvo ocho años en el poder, rodeada de algunos fascinerosos que le quedaron de herencia del anterior gobierno de su marido, que no se los pudo sacar de encima o pensar que no iban a estar en algún grado de corrupción (…) Ahora, que seguramente se sintió sorprendida por mucha gente que tenía a su alrededor, no tengo duda".

En tanto, el abogado defensor descartó cualquier posibilidad de aspirar a un cargo público, en caso de que la propia Cristina Fernández de Kirchner se presentara en las elecciones legislativas de 2017: "Jamás sería funcionario público. Primero, no me alcanzaría el sueldo, yo gano muy bien como abogado y la verdad, no tengo la vocación de los políticos de hacerlo por servicio, por el pueblo. No, yo quiero mantener mi estilo de vida y mi estilo de vida con un sueldo de funcionario público seguramente no alcance para mantenerlo".