"México acaba de dar el primer paso para recorrer un largo camino para potenciar su capacidad energética", dijo Galuccio en declaraciones a la prensa al destacar el proceso de cambio que lleva adelante la petrolera mexicana en el marco de una reforma energética que se propone elevar la producción a través del desarrollo offshore y no convencional de gas y petróleo con un fuerte aliento a la inversión privada.

Al respecto, el presidente de YPF consideró que "la decisión del gobierno mexicano de permitir la participación privada en el desarrollo de sus hidrocarburos responde a una necesidad clara de potenciar la industria del petróleo y el gas actual, donde las alianzas con socios estratégicos son clave”.

“Para poner las reservas en producción, necesitamos de socios que inviertan, para revertir el declino natural de los yacimientos, y con el fin de disminuir el desbalance energética y lograr el autoabastecimiento", enfatizó el titular de la compañía nacional.

En un proceso que emparenta a las dos petrolera, Galuccio enfatizó que "el desarrollo de los no convencionales requiere no solo enormes sumas de dinero, sino compartir riesgos, y experiencia”.

“Aunque cada realidad tiene sus particularidades -agregó- nos sentimos identificados en este proceso que México lleva adelante. Sin resignar soberanía ni control sobre sus recursos, México se abre al mundo y a las grandes compañías porque sabe que son necesarias inversiones millonarias para hacer realidad el desarrollo del offshore y del no convencional que, como en Argentina, tienen un enorme potencial”.

Galuccio y el presidente de Pemex, Emilio Lozoya, mantuvieron varias reuniones de trabajo en los últimos meses, tal como había confirmado hoy el miembro del Consejo Corporativo de Pemex, Fluvio Ruiz Alarcón, en ocasión del World Shale Oil & Gas Latin America Summit, que se realiza en Buenos Aires.

En ese contexto, Ruiz Alarcón, confirmó que existen conversaciones entre esta empresa e YPF para avanzar en un acuerdo para ser parte del desarrollo de hidrocarburos no convencionales (shale oil y shale gas) en Vaca Muerta, provincia de Neuquén.