La suba hizo que se convierta en el año que más dinero ingresó por las famosas retenciones a la exportación de soja. El monto ascendió a 372.018.873,16 pesos. Durante 2015 habían llegado a las arcas provinciales 285.218.383,71 pesos por ese concepto.

El mejor año del fondo de la soja, como se lo conoce comúnmente, había sido 2015, cuando La Pampa recibió 285.218.383 pesos. En 2014 la cifra había ascendido a 266.738.727 pesos. En 2013, el aporte fue de 174.949.015 pesos y en 2012 la cifra fue de 132.893.499; en 2011, la recaudación fue de 131.504.860 y en 2010 había sido de 135.283.850 pesos. Durante el primer año de creación del fondo solo llegaron 53.366.577 pesos porque comenzó a distribuirse en abril de 2009.

El FFS tuvo su origen luego de la crisis provocada por la Resolución 125 y se dictó con el objetivo de generar un instrumento que redistribuya con carácter federal los excedentes generados por la comercialización de soja.

Además, un 30 por ciento del monto dirigido a las provincias debe ser a su vez girado de forma automática a los municipios dependiendo de la cantidad de población y otros criterios establecidos en la Ley Nº 10.820 de Coparticipación Municipal. Estos fondos están condicionados a ser dirigidos a financiar proyectos que contribuyan a la mejora de la infraestructura sanitaria, educativa, hospitalaria, de vivienda o vial en ámbitos urbanos o rurales.

Durante los años del kirchnerismo las retenciones al complejo sojero eran del 35%. Ni bien arribó al Gobierno el presidente Mauricio Macri cumplió con su promesa y redujo en cinco puntos las retenciones.

Además, este año le dio una buena noticia al agro porque el Ministerio de Agroindustria oficializó el 2 de enero, a través del Boletín Oficial, el decreto que determina la reducción de 0,5 punto porcentual mensual de la alícuota del derecho de exportación aplicable a la soja y sus subproductos y que regirá desde enero del año próximo hasta diciembre de 2019 inclusive.

La medida se adoptó a través del decreto 1.343, con fecha del 30 de diciembre de 2016. La norma precisa que la reducción de las retenciones a la soja y subproductos en un 0,5 por ciento mensual “operará desde el mes de enero de 2018 y se extenderá hasta el mes de diciembre de 2019, inclusive, debiendo aplicarse a partir del primer día de cada uno de los meses comprendidos en la presente medida”. De esta forma, los derechos de exportación para la soja, actualmente del 30 por ciento, “serán del 18 por ciento en diciembre del 2019, y para los subproductos del 15 por ciento”.

El fondo fue creado por la administración kirchnerista en 2009 y se nutre de las retenciones a la exportación de la soja. De lo recaudado, la Nación distribuye un porcentaje a las provincias y estas hacen lo propio con los municipios. Si bien el aumento del 30,43 por ciento estuvo por debajo de la inflación anual de 2016, significó un alivio para la provincia y principalmente las comunas. Los recursos están destinados a obras de infraestructura y para los jefes departamentales son clave. Es que con esos aportes pueden responder a las demandas de los vecinos, como pavimentar y construir veredas, por ejemplo, cosa que se les dificulta si tienen que echar mano a sus cuentas, ya que la mayoría tiene escasos de niveles de recaudación.

Números

El Fondo Federal Solidario (FFS) se expandió 25,8 por ciento en diciembre respecto de igual mes del año pasado, según un informe de Economía y Regiones. El FFS se obtiene con el 30 por ciento de las retenciones del complejo sojero y permite redistribuir recursos a otros sectores. Las provincias percibieron 20.471 millones de pesos por este fondo, 14,4 por ciento por encima de lo presupuestado. Este fondo distribuyó desde su creación, en 2009, y hasta 2016, más de 85.500 millones de pesos en todas las provincias del país, constituyéndose en un importante instrumento de desarrollo territorial. En el crecimiento del fondo impactó la suba de los precios del aceite y porotos de soja, de un 22,8 y un 10,3 por ciento interanual, mientras que el de la harina aumentó 8,6 por ciento.