En Santa Fe, el candidato radical, José Corral, quedó en un cómodo tercer lugar detrás del ganador Omar Perotti y del socialista Antonio Bonfatti, que fue derrotado por una diferencia de entre 3 y 4 puntos. En Tierra del Fuego, el referente del gobierno nacional, Juan Rodríguez, también quedó tercero, pero con apenas el 3,82 por ciento de los votos, protagonizando un verdadero papelón electoral.

En la provincia más austral ganó Gustavo Melella, pero no logró evitar el ballotage contra la gobernadora Rosana Bertone, lo que significa que candidatos cercanos al kirchnerismo se alzaron con casi el 90 por ciento de los votos, dibujando un panorama sombrío para Juntos por el Cambio.

En los distritos restantes los candidatos del gobierno nacional lograron quedar en segundo lugar, pero con números que los dejaron muy lejos del protagonismo electoral. En Formosa, Adrian Bogado obtuvo el 28,9 por ciento de los sufragios, y fue derrotado por el gobernador Gildo Insfrán que cosechó poco más del 70 por ciento, demostrando que su liderazgo en la provincia sigue vigente.

Apenas en San Luis, el postulantes PRO, Claudio Poggi, hizo un papel aceptable logrando el 34 por ciento de los sufragios para quedar en segundo lugar detrás de Alberto Rodriguez Saá, que consiguió la reelección con poco más del 42 por ciento. El agregado en este caso es que el hermano del gobernador, Adolfo Rodriguez Saa, también era candidato y quedó tercero con el 22 por ciento de los votos, es decir que entre los candidatos del peronismo sumaron más de 60 puntos.