Las tensiones en el interior del gobernante Partido Conservador británico han quedado expuestas hoy, tras la renuncia del ministro de trabajo, Iain Duncan Smith, en desacuerdo con los planes del gobierno de reducir las pensiones para las personas discapacitadas, mientras se reducen los impuestos a las clases más acomodadas.

Duncan Smith renunció a última hora de ayer, luego de que el miércoles se aprobara un recorte a las pensiones que ha provocado muchas críticas dentro del propio Partido Conservador.

"Soy incapaz de observar de forma pasiva cómo ciertas medidas se ponen en marcha para cumplir unos objetivos fiscales autoimpuestos que, en mi opinión, se perciben con una finalidad política, más que como un beneficio para la economía del país", afirmó el antiguo líder conservador, en su nota de renuncia.

El gobierno anunció el pasado miércoles un recorte de 4.400 millones de libras (unos 6.300 millones de dólares) durante los próximos cuatro años en el fondo para los llamados Pagos para la Independencia Personal, una medida que afectará a 640.000 británicos de entre 16 y 64 años.

La salida de Duncan Smith ha desnudado las tensiones existentes hacia el interior del Partido Conservador, a tres meses del referéndum sobre la permanencia británica dentro de la Unión Europea (UE), que se celebrara el 23 de junio.

Cameron, tras algunas modificaciones incorporadas a la membresía, se convirtió en un férreo defensor de la permanencia dentro del bloque europeo, mientras que Duncan Smith se contaba entre los cinco ministros del gabinete defensores de la salida de la UE.

El ahora ex ministro, heredero político de Margaret Thatcher, lideró la formación entre 2001 y 2003 con un programa basado en la defensa de la independencia del Reino Unido frente a la UE y la fortaleza de la libra esterlina respecto al euro.

El escocés, de 61 años, había asumido la cartera de Trabajo y Pensiones en mayo de 2010, siete años después de haber sido destituido como líder conservador entre críticas a su falta de liderazgo y carisma.

Cameron, que dio libertad de acción a sus ministros de cara al referéndum, ahora deberá lidiar con las rupturas dentro del partido y para mantener su gabinete unido mientras el debate sobre la permanencia o salida eleva el tono cada día.

Esta mañana expresó su "decepción y perplejidad" por la renuncia de Duncan Smith y lamentó que no haya manifestado su desacuerdo durante las reuniones de gabinete en las que se tomaron las decisiones al tiempo que prometió revisar los recortes.

"Hoy hemos acordado no proceder a aplicar las medidas en su forma actual y volver a trabajar juntos para enmendarlas en los próximos meses", aseguró citado por la agencia de noticias EFE.

Horas después de la renuncia de Duncan Smith, declarado enemigo de la integración en Europa desde la época del Tratado de Maastricht, a principios de los 90, Cameron nombró hoy como nuevo titular de Trabajo y Pensiones al hasta ahora ministro para Gales, Stephen Crabb, público defensor de la permanencia en la UE.

El nombramiento de Crabb, un escocés de 43 años, ya fue informado a la reina Isabel II, quien ya dio su aprobación a la designación, anunció Cameron en un comunicado.

La renuncia añade un nuevo capítulo a una larga disputa personal con el ministro de Economía, George Osborne, que en 2013 llegó a decir que Duncan Smith no era lo suficientemente "inteligente" para llevar a cabo las reformas que se proponía y que en el presupuesto de 2015 retiró parte de los fondos de su ministerio.

Además, esta salida pone en el foco del conflicto a Osborne, quien aspira a suceder a Cameron al frente del Partido Conservador al término de esta legislatura, en 2020, al tiempo que podría beneficiar al alcalde de Londres, Boris Johnson, la cara más visible del ala euroescéptica de los conservadores.

Desde el Partido Laborista, primero de la oposición en el Reino Unido, se ha sugerido que la renuncia del político escocés tiene más que ver con la campaña antieuropea de cara al referéndum del próximo 23 de junio, en la que Duncan Smith es una de las caras visibles, que con las políticas sociales del Gobierno.