cha de la basura que se arroja en los espacios públicos no es la convencional que se deposita en una bolsa adentro del contenedor, sino que es la que se acumula alrededor de éstos y que comprende restos de todo tipo de objetos y comida que generalmente ocupa gran espacio en la vereda.

Esta basura incluye partes de objetos y muebles, montañas de piedra, tierra, ramas de árboles y restos de alimentos.  

Se encuentra esparcida alrededor abarcando un gran espacio de la vía pública llegando a cubrir gran parte de la vereda.

En este sentido la conducta ciudadana del vecino es la de poder deshacerse de la misma de cualquier forma y por eso busca algún lugar público para depositarla.  

Los alrededores del contenedor sirven como lugar para ello.

Y sucede es que queda depositada mucho tiempo allí ya que el servicio de recolección no puede llevarla. La consecuencia de ello es que se esparce aún más por todas las demás veredas y la calle.

El vecino que corta un árbol, por ejemplo, busca algún espacio público para arrojar las ramas y muchas veces lo hace alrededor de un contenedor sabiendo que es un depósito de residuos.

En este sentido el ambientalista Eduardo D'Elía contó a TiempoSur que el conflicto gremial de hace varios meses que mantuvo el municipio hace que influya en la gestión de los residuos.

“Hace cuatro meses que estoy pidiendo que vengan a arreglar un pozo que hay en la calle, pero han venido y si bien toman el reclamo no pueden ir por el conflicto que tienen”, dijo.

Sostuvo que “el municipio hoy se dedica sólo a pagar los sueldos de los empleados municipales, pero todavía no se ha puesto a gestionar los problemas que tiene la ciudad en cuanto al tema de la basura”.

Consideró además que hasta que el municipio no cuente con los recursos recién se podrá volver a trabajar sobre el tema de la basura. En este sentido  debería existir algún tipo de gestión sobre el residuo, que hoy no la hay.

“Habría que preguntar al municipio qué debe hacer una persona que en el invierno poda su árbol y que es mucha, qué hace con la basura, esto es las ramas, adonde las puede llevar”, sostuvo el ambientalista.

Entonces, consideró, el vecino lo que podría hacer es cortar el árbol dejar las ramas afuera y avisar al municipio para que venga a recogerlas.

“Pero sucede que este no va a buscarla y entonces esas ramas terminan esparcidas por todos lados. Y el basurero no puede tampoco juntarla porque le llena el camión enseguida, además solo se dedica a recolectar las bolsas”, explicó.

Así, afirmó que el tema de la limpieza de la ciudad está afectada por los conflictos gremiales.

Y el vecino lo que quiere hacer es “sacarse la basura de su casa pero al arrojarla está en la vereda de todos los demás vecinos y pasa a ser basura de todos”, dijo.

“Junto con la educación ciudadana y la normativa tiene que haber también recursos para que esto se cumpla. Se puede decir que se cobraría una multa a la gente que tira en cualquier lado pero con solo avisar que va a venir un camión y la va a retirar no habría basura en la calle.”

Por último dijo que “si no hay camión que la vaya a recoger puede estar hasta días.

Es una cuestión de cómo se van a conseguir los recursos para que se maneje bien el tema de la basura”.