El gobierno de Carlos Arroyo enfrenta por estas horas una fuerte crisis en el Concejo Deliberante. Ocurre que las últimas declaraciones del presidente del Cuerpo y amigo inseparable del jefe comunal, calaron hondo en el Arroyismo.

“Me gustaría tener una conversación más fluida con Arroyo, sobre todo antes de que los nombramientos lleguen cocinados”. “Hay que mirar más a las bases para ocupar cargos, son más fieles”, fueron algunas frases.

Además destacó que “Arroyo está un poco agobiado por la catarata de problemas que tiene” e indicó que “me harta bastante eso de la herencia recibida. Nos votaron para gestionar”.

A pesar que el 24 de marzo hubo una reunión entre Arroyo y Saralegui antes de la sesión especial, la relación entre ambos no es la mejor. “Arroyo le brindó su apoyo para seguir como presidente del Concejo pero algunos no quieren que sea así”, manifestó una fuente del oficialismo consultada por Loquepasa.net.

Ocurre que un sector del Arroyismo, encabezado por Guillermo Arroyo (hijo del intendente) buscaría que Saralegui no siga al frente del deliberativo. Eso podría ocurrir el 1º de abril cuando se realice la sesión preparatoria del Concejo Deliberante.

Para reemplazar a Saralegui comenzó a circular un nombre. La concejal arroyistaPatricia Leniz, quien sorpresivamente ha comenzado a tener protagonismo en algunas comisiones del cuerpo.

Sin embargo ese no es el único nombre que está dando vueltas. La UCR también pretende ocupar la presidencia. En ese caso la concejal Cristina Coria y Mario Rodríguez disputan “fuertemente” ese espacio de “candidatos”.

Desde la oposición miran con cierta sorpresa esta fuerte disputa interna en el oficialismo pero dejan en claro por lo bajo que Guillermo Sáenz Saralegui es un presidente que “escucha a todos los bloques” y debería continuar en su cargo.

Al mismo tiempo otra fuente consultada por este Portal, dejó en claro que “si lo tocan, Sáenz Saralegui no se quedará quieto. Eso dalo por hecho”.

Mientras el intendente Arroyo se muestra cada día más en soledad, sin apoyo del PRO ni de los legisladores oficialistas, mientras no logra completar su gabinete a tres meses de haber asumido el cargo, mientras ya son cuatros los funcionarios que dejaron la gestión por distintos motivos en ese tiempo, ahora se suma una fuerte disputa interna en el Concejo Deliberante. Demasiados problemas y muy poca gestión para 100 días de gobierno.