YPF dio inicio a los trabajos de ampliación de su planta de tratamiento en Loma Campana, Neuquén. Basada en el incremento de la extracción petrolera dentro de la formación no convencional Vaca Muerta, esta propuesta implicará un aumento de un 45% en la capacidad operativa del complejo. La expansión, que demandará una inversión de u$s 23 millones, se llevará a cabo por medio de un sistema modular. YPF espera que la obra esté lista antes de fin de año. No obstante, en las próximas semanas ya se registrará un aumento preliminar en los despachos de 3.600 barriles por día.

Asite //Este emprendimiento nos garantiza una capacidad de tratamiento adecuada hasta el año 2021. Y para entonces prevemos, además, que haya plantas propias tanto en La Amarga Chica como en Bandurria Sur”

La planta no sólo procesa el shale oil que se extrae de Loma Campana, sino también el de La Amarga Chica y Bandurria Sur, dos bloques que están a punto de ingresar a su fase de desarrollo masivo. Hasta ahora, las instalaciones son capaces de recibir alrededor de 10.800 metros cúbicos (m³) por día en bruto y generar 8.000 m³ de petróleo, lo que equivale a unos 50.000 barriles diarios.De acuerdo con Gustavo Astie, gerente regional de No Convencional en YPF, mediante esta iniciativa la recepción crecerá hasta los 21.000 m³ por día, mientras que el procesamiento de crudo trepará hasta los 18.000 m³; o sea, unos 113.000 barriles diarios. “Esto nos garantiza una capacidad de tratamiento adecuada hasta el año 2021. Y para entonces prevemos, además, que haya plantas propias tanto en La Amarga Chica como en Bandurria Sur”, anticipó.

Según sus palabras, por el alza en la producción de shale oil la compañía también está construyendo un nuevo oleoducto de evacuación que estará listo antes del cierre de 2018 y unirá Loma Campana con Lago Pellegrini. “Con 88 kilómetros de extensión, este tendido nos permitirá conectarnos desde allí con la red general, transportando 25.000 m³ de petróleo. Será el oleoducto más importante de Vaca Muerta”, enfatizó.La obra, apuntó, prácticamente duplicará la capacidad que en la actualidad posee la red de Oldelval. “En su construcción invertiremos alrededor de u$s 80 millones”, acotó el directivo.

Inversiones millonarias

YPF lidera cómodamente el ranking de inversiones para poner en valor los recursos de Vaca Muerta, en la Cuenca Neuquina. Según cálculos de la Gerente Regional de No Convencional que conduce Astie, entre 2012 y 2017 la petrolera desembolsó –en conjunto con sus aliados– más de u$s 8.400 millones en la formación. “Eso nos permitió acelerar la curva de aprendizaje y la reducción de los costos”, resaltó el ejecutivo. Las empresas socias, recalcó, se convirtieron en un factor clave de crecimiento en este negocio. “No solamente por una obvia cuestión de capital económico, sino también por el intercambio de experiencias”, explicó.

Asite //“También estamos construyendo un nuevo oleoducto de evacuación que estará listo antes del cierre de 2018. Con 88 kilómetros de extensión, unirá Loma Campana con Lago Pellegrini”

A su entender, YPF fue pionera en el desarrollo de una infraestructura que no existía y que hoy es vital para el desempeño operativo en Vaca Muerta. “Sin grandes esfuerzos traducidos en obras hídricas, de procesamiento y edilicias, definitivamente no hubiera sido posible avanzar con las fracturas, las perforaciones y la puesta en valor comercial del reservorio”, aseguró.

Planes ambiciosos

Específicamente en el rubro del shale, YPF ya produce más de 110.000 barriles de petróleo equivalente por día, de los cuales aproximadamente 40.000 corresponden a crudo y el resto a gas natural. Se trata de más de un 20% de la oferta total de Neuquén. “Contamos con cerca de 800 pozos en producción y participamos en casi la mitad de la superficie total en Vaca Muerta (estimada en 5,5 millones de acres)”, puntualizó Astie.

Además de Loma Campana y El Orejano, que ya se encuentran en ‘modo factoría’, la petrolera viene avanzando firmemente en los pilotos de La Amarga Chica, Rincón del Mangrullo, La Ribera, Bajo del Toro, Aguada de la Arena y Bandurria Sur. “Disponemos de casi 500 empleados que desempeñan distintos roles en Vaca Muerta, a los que deben sumarse unas 3.500 personas que trabajan para diferentes contratistas. Este año pensamos desembolsar cerca de u$s 1.900 millones en la zona”, completó.