"¿Va a declarar o se va a negar?", preguntó el presidente del Tribunal Oral Federal 2, Jorge Gorini, mirando la pantalla que del otro lado le mostraba al ex presidente Carlos Menem en su casa en La Rioja.

"Me niego a declarar, señor", respondió Menem, acusado por encubrir el atentado a la AMIA. Pero debió repetir su frase ante una réplica de Gorini por algunas interferencias en el sonido. "Me niego a prestar declaración", dijo entonces el ex mandatario.

Así fue hoy la reaparición de Menem en el juicio que se lleva a cabo en Comodoro Py, tribunales a los que el actual senador no va por aducir problemas de salud. El Tribunal Oral Federal 2 investiga al ex presidente por el presunto encubrimiento de la voladura de la mutual judía, que mató a 85 personas en 1994.

Menem informó que no prestará declaración indagatoria luego de que los jueces rechazaran el rechazo a todos los planteos hechos por las defensas de los acusados.

Días atrás el abogado de Menem pidió que su defendido sea relevado del secreto de Estado para poder declarar. El 20 de agosto pasado, el defensor Omar Daer advirtió que la declaración del ex mandatario podría afectar "los intereses del Estado argentino" y hasta provocar "el rompimiento de la convivencia pacífica" con otras naciones.

Daer explicó que, tras los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA, Menem convocó a la SIDE y a los servicios de inteligencia de Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel y Brasil, entre otros, para esclarecer esos hechos. Menem está imputado por el encubrimiento de la llamada "pista siria".