Alberto Rodríguez Saá desembarcó ayer en Villa de la Quebrada como parte de su campaña con vistas a las elecciones primarias del próximo 9 de agosto. Allí reunió a la dirigencia del departamento Belgrano y a los vecinos de la localidad y localidades cercanas a quienes les dejó un mensaje de unidad y les trasmitió que continuará con las políticas exitosas del peronismo puntano. 

Rodríguez Saá llegó a las 19:30 al salón “Carlitos”, ubicado al frente de la plaza principal del pueblo, donde lo esperaban unas 350 personas. Su candidato a vicegobernador, Carlos Ponce, fue el primer orador y pidió “no dudar” en acompañar al “proyecto más exitoso del país” y también la candidatura a presidente de Adolfo Rodríguez Saá.

Lo primero que hizo Alberto fue describir la particular elección que tiene por delante el departamento Belgrano que este año no renueva cargos en la Legislatura provincial (diputados ni senadores) y sólo elige intendente en Villa de la Quebrada, Nogolí y concejales en Villa General Roca. Después nombró a los postulantes (titulares y suplentes) uno por uno: “Al que gane las internas todos lo vamos a acompañar”, dijo mientras se acomodaban a su lado Cristian Perez, José Luis Amieva, Silvina Becerra y Edgardo Ciccone (todos van por la intendencia de Nogolí) junto a Marcelo Godoy, “Pelusa” Lobos y Mario Alcaraz (que aspiran a gobernar la Villa). También subieron al escenario Carlos García y Sonia Gatica integrantes de la única lista de concejales para Villa General Roca. Una vez que estuvieron todos con él hicieron un abrazo colectivo en señal de unidad.  “Estos son los candidatos de la Lista Celeste Unidad. El que gane lo hacemos intendente. Y el que no, lo voy a llamar para que me ayude a trabajar en San Luis”, dijo Alberto y despertó una ovación. 

A esa altura el humo de los choripanes que se estaban cocinando detrás del escenario ya había invadido el salón. Alberto hizo mención al tentador aroma que se respiraba y esa referencia fue una especie de bisagra en su discurso para pasar a hablar de sus propuestas. Entonces anticipó la puesta en marcha de un plan de trabajo que irá orientado a los jóvenes que “tienen que estudiar y trabajar y quedarse en el pueblo”, dijo. También describió su idea de construir grandes parques “principalmente dirigidos a los chicos”,  pero que además tengan un salón multiuso para hacer actividades recreativas y culturales bajo techo, junto a un hospital y una comisaría, todo forestado con especies de hojas perennes que embellezcan el predio pero que además hagan a veces de “cortafuego” en caso de posibles incendios forestales.

“¿Cómo no vamos a seguir construyendo viviendas si es uno de los logros más grandes que tenemos?”, dijo en otro pasaje de su discurso. Y recordó que de las casi 100 mil casas que hay en toda la provincia, más de la mitad son viviendas sociales construidas por los sucesivos gobiernos peronistas desde 1983 en adelante.

Alberto dejó un párrafo aparte para hablar del destrato en materia de salud que reciben los mayores. “PAMI: vamos a hacer un acto de rebelión. A los abuelos de San Luis los vamos a cuidar nosotros y les vamos a construir hospitales para atenderlos”, dijo. De la mano de esa idea irá también la llegada de especialistas y la instalación de una facultad de Medicina. “Hay un candidato que fue rector de la universidad y lo prometió pero no lo hizo. Nosotros lo vamos a hacer”, sentenció. 

A los vecinos de Villa de la Quebrada los invitó a trabajar juntos para agudizar el ingenio y explotar aún más turísticamente la Villa, sumando fechas a la festividad del Cristo Milagroso de manera de atraer más turismo y generar recursos que se queden en el pueblo.