Amato DeLuca, uno de los abogados de la joven estadounidense, nacida en Rhode Island y convertida al islam, indicó en rueda de prensa que Rusell, que cambió su apellido a Tsarnaeva, “hace todo lo que puede” para ayudar en la investigación.

El FBI ha pedido una entrevista con la mujer para hablar sobre su marido, muerto el viernes tras un duro enfrentamiento con la policía, pero DeLuca no aclaró si han hablado directamente con ella.

En una comparecencia ante la prensa, DeLuca aseguró que Rusell, de 24 años, quedó “en un shock absoluto” al conocer la participación de su marido, quien tenía 26 años, y del hermano de éste, Dzhokhar (19) en el ataque.

DeLuca afirmó que la viuda de Tamerlan, considerado el instigador de los atentados que ejecutaron sin ayuda los dos hermanos de origen checheno, no sabía nada de los planes de poner bombas en la recta final de la maratón del pasado 15 de abril y que se enteró por la prensa.

Rusell, que usa el velo musulmán, se ha refugiado en la casa de sus padres en Rhode Island, lejos de los medios de comunicación y, según su abogado, está profundamente consternada.

Tamerlan Tsarnaev y Russell se habían casado en el año 2010 en una ceremonia religiosa musulmana, y tuvieron una hija.