Desdé las últimas horas de de la noche del jueves comenzaron a confluir hacia Trenque Lauquen efectivos policiales de toda la provincia; camiones, patrulleros, una división de perros adiestrados para localizar estupefacientes, El operativo fue el fruto de una larga investigación que se aceleró tras un intento de asalto que habría escondido un ajuste de cuentas.
Ese es el saldo provisorio de los 231 allanamientos practicados desde las 2 de ayer en la ciudad de General Villegas y en la localidad de Bunge. El dato que más estupor ha causado es el que indica que uno de los detenidos es un oficial de la Policía Bonaerense que, presuntamente, era el “correo” que viajaba a Capital Federal y posiblemente a la provincia de Santa Fe para traer la droga que luego se vendía en Villegas. Se trata de Matías Salega que a esos fines se movilizaba en un auto de su propiedad, un Seat León. Ayer fue trasladado a un calabozo de la comisaría de Carlos Tejedor. Salega deberá afrontar no sólo la causa penal sino también la intervención de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad.
Los otros detenidos
Según informó la fiscalía los detenidos son Leonardo Almeyra, Raúl Arroyo, Ricardo Aranda, Ramón Hilario Campos, Manuel Ibarra, Matías Salega (policía) y su hermano Lucas Salega. Menos el efectivo, todos los demás fueron trasladados a la Comisaría 1ª de Trenque Lauquen y en el dìa de hoy serían llevados a comparecer ante el fiscal interviniente.
En Bunge fue detenido Nicolás Moraglio, mientras que otro vecino se fugó y aún no pudo ser localizado, por lo que se reservó su nombre.
El operativo
Más de 150 policías y unos 20 agentes judiciales que se habían concentrado en un lugar prefijados, irrumpieron en la ciudad de Villegas alrededor de las 2. Los procedimientos fueron prácticamente simultáneos. En el único lugar donde se originó un conato de resistencia fue en el domicilio del policía Salega quien habría efectuado algunos disparos
Entre el material secuestrado hay que enumerar el auto de Salega, 40 bolsitas de cocaína, dos pedazos de otras tantas bochas de las que ya se había sacado droga, un colador para preparar las dosis, balanzas de precisiòn, numerosos celulares algunos de los cuales fueron abiertos en el lugar por orden del juez, elementos de corte, agendas y anotaciones varias.
Las acciones fueron coordinadas por el comisario mayor Darío Duarte Soroka, director de la Delegación de drogas ilícitas con asiento en Pehuajó; el fiscal Fabio Arcomano y el ayudante fiscal en estupefacientes Raúl Carini Hernández.
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