Ezpeleta Las imágenes lo dicen todo: basura sobre las calles, las veredas, las plazas, las paradas de colectivo… Y también frente a un jardín de infantes y a una iglesia. La problemática tiene dos causas principales: por una parte, la basura domiciliaria está desparramada mayormente sobre Avenida La Plata y Avenida Francia porque los camiones de Covelia no pueden ingresar al barrio.

Al ser muy angostas las calles, los vehículos recolectores no pueden hacer torsión, y por lo tanto se ha decidido que no entren. Por otra parte, sumada a la basura hay también una gran cantidad de ramas, producto de la poda indiscriminada de algunos vecinos, que han desoído la ordenanza municipal que lo prohíbe. Frente a esto, el Municipio está realizando un proceso de “chispeado”, con el fin de reducir lo que ocupan las ramas.

Horacio Rojas

El Director de Higiene Urbana y vecino de Ezpeleta Oeste, Horacio Rojas, reconoció a Radio Quilmes (FM 106.5). que los camiones no ingresan a los barrios y que por lo tanto recogen la basura sólo de Avenida La Plata. Pero el problema, según Rojas, es que los camiones no dan abasto para recoger todo lo que hay, y es por eso que se generan los basurales a cielo abierto.

Covelia

La empresa Covelia, que tiene a su cargo el servicio de recolección, "pasa una sola vez por semana a recoger los residuos de Avenida La Plata", según informó Rojas. A su vez, desde la Dirección de Higiene Urbana pasan dos veces más por semana, por lo tanto los residuos son levantados un máximo de tres veces semanales. Rojas reconoció también que sobre Avenida La Plata no hay un solo cesto de basura.

Ante la imposibilidad de que los camiones ingresen al barrio, surge la pregunta de cómo organizar la recolección para evitar la grave situación por la que está pasando el barrio. En relación con esto, Horacio Rojas comentó que oportunamente se colocaron los tachos de Covelia, para centralizar allí los desechos, pero los vecinos “los queman, los tiran, los dan vuelta. Pusimos los contenedores del Municipio, y vinieron todos los feriantes de esa zona, que son muchísimos, a descargar ahí.” Como estas soluciones no funcionaron, según el funcionario, se optó por no hacer nada. Mientras tanto, desde el Municipio se culpa a los vecinos por el estado del barrio.

Poda y ramas por doquier

Las ramas invaden el barrio, y los vecinos acusan a su delegado municipal, Lucho Gonzalez, de depositar todas las ramas del distrito sobre la plazoleta de Paraguay y Argerich, frente a un jardín de infantes y a una iglesia.

La respuesta desde la Delegación Municipal es que los vecinos han podado numerosos árboles sin ningún tipo de permiso. Además, no han hecho podas correctivas, sino que han prácticamente “matado” muchos ejemplares.

Chispiado

Para reducir la cantidad de ramas, se está llevando adelante un proceso de

“chipeado”, que consiste en la trituración de ramas y hojas y convertirlas en aserrín, que luego es usado para rellenar en zonas de la costa. El problema es que, mientras tanto, los montículos de ramas se acumulan por el barrio, contribuyendo a la generación de basurales. Además, los vecinos reclaman que se está usando la Sociedad de Fomento barrial para guardar la máquina chipeadora, que las ramas se acumulan en esta institución, y que incluso se ha cortado una calle por la cantidad de ramas.

"Si los vecinos colaboran, podríamos mejorar el servicio. Ningún vecino pide permiso para podar, hacen lo que quieren y después llaman para que nos llevemos las ramas de sus árboles.", afirmó Gonzalez.