Pensados para marcar un hito en la historia del deporte universitario nacional, se preparan para agosto los primeros Juegos Universitarios Argentinos (JUAR), de los que serán sedes regionales diez universidades, entre ellas la Uader.

Los JUAR son una competencia deportiva en 19 disciplinas, organizadas a través de tres Ministerios del Gobierno Nacional: Educación (Subsecretaría de Gestión y Coordinación de Políticas Universitarias), Desarrollo Social (Secretaría de Deporte) y Relaciones Exteriores y Culto (Secretaría de Asuntos Relativos a Malvinas). Junto a estos ámbitos, se cuenta la presencia de la Federación de Deporte Universitario Argentino (FeDUA).A propósito de este acontecimiento de envergadura,  Uader participó en una jornada de trabajo en Buenos Aires, donde autoridades gubernamentales y representantes de las casas de estudio ultimaron detalles organizativos, que se realizó el 8 de julio en Capital Federal. En la oportunidad, se avanzó sobre la unificación de criterios respecto a aspectos reglamentarios, prensa y cuestiones administrativas. Vale decir que en torno a los JUAR se espera la participación de más de 20 mil estudiantes de nivel superior. En agosto se desarrollarán tres jornadas de competencia a escala regional, para determinar ganadores en cada disciplina que competirán en una instancia nacional a llevarse a cabo en noviembre, en Buenos Aires, se informó a esta Agencia.

Se incorpora al consejo regional del INTAEn el marco de un plenario del Centro Regional Entre Ríos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el rector de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader), Aníbal Sattler, dispuso de un tiempo para exponer una breve reseña de la situación actual de la casa de estudios y manifestar el interés de integrarse al consejo regional del organismo, donde diversos actores sociales tienen su representación.La Uader y el INTA ya vienen trabajando de manera articulada a través de diversas acciones que involucran a investigadores, docentes y profesionales del sector agropecuario y de desarrollo tecnológico. Se trata, en este sentido, de que la casa de estudios se incorpore al cuerpo directivo del Instituto del mismo modo que otras universidades y entidades políticas y del sector cuentan con la correspondiente representación.